La UC ayuda al programa de la Granja a la Escuela a tener éxito desde hace más de una década

Para crear un programa exitoso de la Granja a la Escuela, el tener una barra de ensaladas de calidad, tan solo representa un pequeño pedazo del pastel. Si bien es cierto que el apoyar a los granjeros locales y proveerles salidas al mercado es la misión esencial del programa de la Granja a la Escuela, también existe un gran conjunto de oportunidades entre el granjero y la barra de ensaladas, así como una lista innegable de desafíos.

Desde 2001, el UC Sustainable Agriculture Research and Education Program (Programa de Investitación y Educación sobre Agricultura Sustentable de la UC) ha venido ayudando al programa de la Granja a la Escuela de Davis y al Distrito Escolar Unificado de Davis a establecer y mejorar sus prácticas al conducir una evaluación anual del programa. Hoy día, en su décimo tercer año, es uno de los esfuerzos de evaluación de la Granja a la Escuela más antiguos del país y el programa de la Granja a la Escuela de Davis no solo está mostrando grandes señales de éxito, sino que también está sirviendo como modelo para otros distritos escolares de toda la región que desean implementar sus propios programas.

Un secreto para el éxito, dice la asistente del programa SAREP de la UC, Jeri Ohmart, “es paciencia y persistencia. Mantenga sus ojos en la recompensa: aumentando los productos frescos, locales y de la temporada en el programa de comidas escolares; y creando un ambiente que enseña el ciclo completo: del huerto a la cafetería, al compostaje o abono y vuelta al huerto”.

Los resultados de la evaluación, que ya están disponibles en el sitio Web de SAREP, son prometedores. Durante el año escolar 2012-2013, el Distrito Escolar Unificado de Davis compró casi 53 por ciento de sus frutas y verduras a granjeros locales, lo cual significa un incremento del 20 por ciento respecto al año anterior. Por otro lado, los esfuerzos de reciclaje del programa mostraron que la cantidad de desperdicios en las escuelas primarias se redujeron en un tercio. El programa ha implementado sesiones para degustar productos con el fin de motivar a los estudiantes a probar alimentos nuevos y saludables, ha ofrecido clases profesionales de cocina para personal escolar de las cafeterías y ha incorporado clases de jardinería y culinaria en el currículo escolar.

Ohmart, quien llevó a cabo la evaluación anual, asegura que la lección más importante de los últimos 12 años de las evaluaciones no es cómo obtener las frutas y verduras más frescas o las comidas más saludables. Las lecciones son mucho más relevantes. “Para cumplir con las metas del programa de la Granja a la Escuela se requiere de desarrollar relaciones sólidas basadas en el respeto y confianza mutuos con los directores y personal de los servicios de alimentos, mantenimiento y operaciones, miembros de las juntas escolares, maestros y padres de familia. Lograr que la comunidad en general participe en cualquier forma posible. Estos son los principios que han mantenido a nuestro programa moviéndose en direcciones positivas a pesar de los problemas con el presupuesto y los vaivenes de las aportaciones de fondos y cambios en el personal”.

Si desea saber más sobre el programa de la Granja a la Escuela de Davis, visite su sitio Web. Lea la evaluación completa, en inglés, Davis Farm-to-School Evaluation o un resumen y recomendaciones (Summary and Recommendations).  Conozca más sobre el trabajo de la Granja a la Escuela de SAREP en su sitio Web.