Las enfermedades del suelo están causadas por patógenos que residen en el suelo, tales como los hongos Fusarium oxysporum, Macrophomina phaseolina y Verticillium dahliae. Estos patógenos son capaces de sobrevivir en el suelo por largos periodos de tiempo gracias a que forman estructuras de resistencia. Por este motivo, el transporte de suelo a través de herramientas o maquinaria puede ser una fuente de inóculo de estas enfermedades. Para demostrarlo, hicimos un experimento en el cual manejamos un tractor a través de un campo infestado con el patógeno. Después, tomamos restos de suelo pegados al tractor para ver si el patógeno estaba presente y en qué cantidad. Del mismo modo, una persona caminó por el rancho, y tras ello, el suelo de sus zapatos también se analizó.
El experimento se llevó a cabo en Febrero de 2020 en el campo experimental del departamento de Fitopatología de la Universidad de California, Davis. El rancho usado es conocido por estar infestado con el hongo de suelo Fusarium oxysporum f. sp. lactucae, el patógeno que causa la Fusariosis de la lechuga. El inóculo se calculó contando unidades formadoras de colonias por gramo de suelo. Una unidad formadora de colonias (UFC) es una estructura de resistencia viva o tejido vegetal colonizado por el patógeno. Usando esta unidad de medida, el resultado fue que el campo estudiado estaba infestado con 243 ± 154 UFCs por gramo de suelo. Este valor representa la media ± el error estándar (un valor que indica la variación entre repeticiones). La cantidad de patógeno en el suelo procedente de las ruedas y el rotavator (rototiller) se calculó en 60 ± 19 UFCs por gramo de suelo. El hongo también estaba presente en suelo tomado de la botas, con un total de 56 ± 18 UFCs por gramo de suelo.
El suelo infestado que se transporta con la maquinaria o con las botas de trabajo puede introducir el patógeno en una nueva zona. Por este motivo, es aconsejable limpiar la maquinaria y los zapatos antes de moverse entre ranchos y asegurarse de que no se transporta suelo de un sitio a otro. Esto se debe hacer siempre y no sólo cuando se conoce que el rancho está infestado, ya que el patógeno puede estar presente a bajos niveles sin mostrar síntomas de enfermedad. Por ello, ¡ningún terreno puede ser clasificado como libre de patógenos!
Attached Images:
Tractor circulando a través del campo experimental infestado con Fusarium oxysporum f. sp. lactucae.
Suelo recogido desde las ruedas del tractor y el rotavator (tiller) y recolectado en una lona de plástico.
Suelo recogido desde las ruedas del tractor y el rotavator (tiller) y recolectado en una lona de plástico.
Recolectando el suelo adherido a los zapatos.