Es sabido que California no cuenta con suficientes maestros
debido al mandato de reducir el número de alumnos por clase, la consecuente
creación de más clases y el aumento de población.
El
problema es serio: en 1991, se requería de 219,000 maestros; 10 años después, la
cifra ascendió a 301,000 maestros. En escuelas en zonas de ingresos bajos y
estudiantes con desventajas educativas faltan más maestros acreditados que en
comunidades de ingresos medios y altos, especialmente en el condado de Los
Angeles. En otras palabras, faltan más maestros acreditados donde predominan las
minorías.
"En
zonas como el Este y Sur de Los Angeles, Compton y Lynwood, los maestros que
enseñan a la mayoría de los niños que no tienen la acreditación requerida,"
indicó John Rogers, subdirector del Instituto para la Democracia, Educación y
Acceso de la Universidad de California. "Más de la mitad de todos los maestros
de primer año en el estado no tienen la acreditación necesaria". Por otra parte,
en escuelas donde los estudiantes minoritarios representan apenas 30 por ciento
o menos de la población estudiantil, el 95 por ciento de los maestros están
acreditados.
Este
es el principal tema que enfoca el ejemplar actual de la revista electrónica
"Teaching to Change L.A," publicada recientemente por el instituto. Primera en su clase, la revista ofrece
un foro donde catedráticos, legisladores, estudiantes, padres de familia y
líderes comunitarios pueden expresar sus opiniones, en inglés y español.
La dirección de la revista es www.teachingtochangela.org.