DAVIS –
(UC)— Los
consumidores estadounidenses gastan cerca de $30,000 millones anualmente en
programas y productos para reducir de peso o evitar el sobrepeso, de acuerdo con
la Asociación Americana contra la Obesidad (AOA).
A pesar
de que el 55 por ciento de los adultos dicen estar interesados en bajar de peso,
el 65% tiene sobrepeso. Además
de sodas dietéticas y comidas bajas en calorías, compran compuestos dietéticos y
productos para hacer ejercicio que se anuncian en medios publicitarios
exagerando sus beneficios.
La
obesidad cobra aproximadamente 300,000 vidas y tiene un costo anual de
aproximadamente $100,000 millones, según Judy Stern, catedrática de nutrición y
medicina de la Universidad de California en Davis y vicepresidenta de la
AOA.
Según Stern, la industria de restaurantes de comida rápida, que compiten ofreciendo porciones cada vez más grandes de comidas y bebidas con un alto contenido de grasas y azúcar, ha contribuido en gran medida a la crisis de obesidad. Pero además de la mala selección de alimentos, la AOA culpa a la falta de actividad física del alarmante aumento de sobrepeso y obesidad.