RIVERSIDE-(UC)— Muchas familias disponen de apenas los recursos
económicos necesarios para sus gastos normales. Para ellas, la llegada de
diciembre representa un gran reto: cómo celebrar las fiestas sin gastar tanto
que al llegar las cuentas en enero no sepan cómo pagarán sus
deudas.
“No es de
sorprender que las celebraciones decembrinas tengan un impacto en el presupuesto
familiar”, observa Karen Varcoe, especialista en asuntos del consumidor con
Extensión Cooperativa de la Universidad de California. “Los gastos pueden
volverse descontrolados por la compra de regalos, tarjetas y porte, papel para
envolver, decoraciones, alimentos, bebidas, transporte, llamadas telefónicas de
larga distancia y otras comprar de la época. Entusiasmarse demasiado al hacer
las compras puede crear dificultades económicas para la familia”, precisa.
El arte de
administrar el dinero durante esta época consiste en disfrutar el espíritu de
las fiestas sin verse obligado a pagar por meses o hasta por años. Las
recomendaciones a continuación pueden servirle para organizar sus gastos,
aprovechar los recursos que tenga a la mano y evitar gastar más de lo que
debiera.
·
Considere el total de sus
gastos. La cantidad que gaste para
las fiestas depende en parte de los valores de su familia. Sin embargo, lo más
importante es fijarse en la cantidad de sus gastos mensuales normales para
determinar cuánto más puede realistamente apartar para los gastos de la época.
·
Prepare un plan de gastos
navideño. Como ya tiene calculada y
ahorrada la cantidad que puede gastar sin afectar su presupuesto mensual, haga
una lista de los regalos, alimentos especiales, llamadas internacionales y demás
gastos que piensa realizar en diciembre y a principios de enero (si celebra el
Día de la Epifanía o la llegada de los Reyes Magos). Decida qué cantidad
apartará para cada cosa. En cuanto a los regalos, recuerde que lo que más
importa es el sentimiento, no el precio.
·
Sea sensato al usar el
crédito. Si decide pagar por
algunos gastos con tarjeta de crédito, evite endeudarse demasiado. Antes de
salir de compras, analice la deuda de crédito que ya tenga. De ser posible,
antes de diciembre cambie las tarjetas con intereses elevados y cuota anual por
tarjetas con intereses menores y sin cuota anual. Lleve la cuenta de los cargos
en diciembre y no exceda la cantidad que pueda terminar de pagar en unos cuantos
meses. Si tiene más de una tarjeta, limite sus cargos a una sola. Esto le
permitirá tener una idea clara de sus gastos navideños y simplificará el pago
cuando llegue la cuenta.
·
Las compras. Compre los regalos antes de la temporada
o su inicio, y compórtese como un comprador sensato. Planee sus compras con una
lista, revise los anuncios en periódicos y circulares y vaya a lugares donde
haya varias tiendas para ahorrar tiempo y gasolina. Compare precios, calidad y
garantías. Lea las etiquetas y demás información. Esté alerta de ofertas y
ventas especiales y aprovéchelas.
·
Los regalos. Los mejores
regalos no son necesariamente los más costosos, sino los que reflejan que se
tomó en cuenta a la persona a quien se van a obsequiar. Pueden ser divertidos o
prácticos, pero siempre muestran que se pensó en quien los recibirá. Use sus
habilidades y talentos para crear regalos hechos a mano, tejidos o cosidos,
horneados o del huerto casero o jardín. Regale algo de su tiempo, el obsequio
más preciado. Puede también apartar una repisa en algún clóset o armario en
donde pueda guardar regalos que vaya comprando durante el año cuando encuentre
una buena oferta. Al llegar diciembre, descubrirá que le faltan muy pocos
regalos por comprar.
·
Las
tarjetas. Es fácil gastar demás en
tarjetas navideñas y de año nuevo. Busque la manera de comprar menos tarjetas.
Considere enviarlas únicamente a quienes no podrá ver durante los festejos.
Diseñe y decore sus propias tarjetas usando tarjetas en blanco. Puede ahorrarse
tiempo y dinero si compra una buena provisión de tarjetas para toda ocasión en
una tienda de descuento.
·
Las
decoraciones. El mejor momento de
comprar decoraciones para las fiestas de fin de año es al término de las mismas,
cuando todo está a precios muy rebajados. Aún mejor es usar las decoraciones que
ya tenga. Si las guarda con cuidado, puede usarlas año tras año. O haga sus
propias decoraciones. Busque en casa artículos con los cuales hacer una corona
navideña, un centro de mesa o algo para decorar el arbolito. Use su talento e
imaginación para dar a su hogar un toque personal y un ambiente festivo sin
gastar mucho dinero.
·
Los invitados.
Considere reunirse con otra
familia o compañeros de trabajo para hacer una reunión en conjunto. Así
compartirán los gastos, el tiempo y el esfuerzo. Ponga en tela de juicio la
necesidad de preparar un menú completo. Tal vez sea suficiente ofrecer sólo
bocadillos o botanas. Puede también hacer una cena compartida, donde los
invitados traen algún platillo o postre en vez de que usted tenga que preparar
todo el convite.
·
Los viajes. Las visitas a
familiares y amistades que viven lejos pueden contribuir a aumentar los gastos
navideños. Busque los pasajes y boletos varios meses antes para obtener los
mejores precios. Al hacer un cálculo adelantado de los gastos del viaje, no
olvide incluir la gasolina y mantenimiento del auto si va a conducir, y los
boletos de avión así como el hospedaje y la alimentación.
·
Donativos
caritativos. Recordar a los necesitados
es parte importante de las celebraciones de muchas familias. Algunas hacen
donativos monetarios a organizaciones caritativas a nombre de otros miembros de
la familia en vez de obsequiarse regalos unos a otros. Ciertamente es siempre
bienvenido el dinero, pero los donativos de tiempo son también valiosos.
·
Distribuya los gastos
adicionales de diciembre durante todo el año. Evite que los gastos de
fin de año interfieran con sus posibilidades de solventar sus gastos de cada
mes. Haga un cálculo de la cantidad que gasta en regalos y demás compras para la
época y separe parte de esa cantidad cada mes. Al llegar diciembre, tendrá
ahorrado el total necesario para celebrar las fiestas con gozo y
tranquilidad.
“Lo más
importante es tomar en cuenta lo que realmente puede gastar durante las fiestas,
tanto en tiempo como en dinero”, enfatiza Varcoe. “Elabore un plan y llévelo a
cabo. Así hará de las fiestas ocasiones para disfrutar, gozar, amar, compartir y
aprender. Estas cosas, que no se encuentran a la venta, son las más preciadas de
la vida”.