Oct 20, 2008
BAKERSFIELD (UC)- Por primera vez en muchos años, tanto ricos como pobres miran consternados los continuos altibajos en la Bolsa de Valores, que irremediablemente causan estragos en los bolsillos de todos por igual.
Una especialista de la Universidad de California aconseja interpretar la actual crisis financiera, que está orillando a algunas personas al borde del suicidio, como la alarma de un reloj despertador para salir de tal pesadilla.
“La gente anda muy estresada; están perdiendo sus empleos. Y para colmo, tienen todas estas deudas de tarjetas de crédito e hipotecas de sus casas”, comentó Margaret Johns, asesora en economía familiar, de Extensión Cooperativa de la UC.
Ya se han reportado suicidios de varias personas a causa de la desesperación, que incluso han asesinado a otros miembros de su familia, para escapar de sus problemas económicos. Igualmente, más personas están acudiendo a servicios de terapia sicológica para sobreponerse a la tensión emocional causada por la incertidumbre en torno a la crisis financiera.
“Los estadounidenses deben escuchar esta alarma y despertar a la realidad. Deben mirar bien cuánto dinero ganan, y cuánto dinero gastan”, afirma Johns. Esos son los conceptos básicos que ella y sus colegas imparten en sus clases gratuitas para enseñar a familias de escasos recursos a alimentarse mejor y hacer rendir más el dinero.
El actual descalabro de la economía estadounidense se atribuye principalmente a la volatilidad en la alza del precio de combustibles y a prácticas usureras en la industria de préstamos hipotecarios. Como resultado, millones de estadounidenses se vieron inmersos en deudas que sobrepasaron sus ingresos y ahora se encuentran a un paso de la quiebra financiera.
Sin embargo, Johns recalca una causa fundamental:
“No había un control para evitar que la avaricia llegara a tal extremo. Y estamos viendo que esta enorme avaricia está causando una recesión mundial. Pero cada persona debe comenzar a asumir su propia responsabilidad”, sostuvo Johns. “En Estados Unidos hay estudios que muestran que la gente sencillamente ha perdido el control cuando se trata de gastar dinero. Y gastan más de lo que ganan.”
Para la gran mayoría de los consumidores, llegar a tal extremo es relativamente fácil en una sociedad en que constantemente se les incita a comprar a crédito, sin tomar en cuenta sus posibilidades económicas, según Johns.
“Lo que ha ocurrido en este país es que han hecho que la gente obtenga crédito fácilmente; les dan todas esas tarjetas de crédito, pero no se les informa de todas las implicaciones de usarlas”, dijo la especialista. “Y la gente usa las tarjetas para todo tipo de compras, como una pizza y cosas que realmente no necesitan”.
La especialista hace notar que los inmigrantes usualmente son más propensos a dejarse seducir con los prometedores encantos que ofrece la industria de tarjetas de crédito.
“Llegan estos inmigrantes y luego, luego se les ofrece que compren a crédito tan fácilmente; y les ponen a su alcance todas esas cosas que quizás ellos no tenían en sus países. Y pronto se ven enfrascados en nuestro hábito de gastar de más”, dijo.
Medidas que pueden ayudarle a sobrevivir la crisis económica
Como primer paso, la educadora comunitaria de la UC aconseja reunir a la familia y analizar su situación económica de manera realista.
"Y, como familia, hay que tomar ciertas decisiones para reducir los gastos y hacer frente a las deudas. Es importante comenzar a saldar las deudas lo más pronto posible, porque entre menos deudas tenga, menos tensión emocional habrá en sus vidas”, explicó Johns. Ella aconseja incluir a los niños en esas decisiones.
Cuide su salud mental
Para controlar la tensión emocional a causa de problemas económicos, Johns recomienda tratar de dedicar más tiempo a las actividades físicas, o a pasatiempos familiares que contribuyen a gozar de un mejor estado emocional. Y, de ser necesario, recurrir a personas entrenadas para ayudar con ese tipo de problemas.
Puesto que los servicios de salud mental públicos usualmente se reservan para casos clínicos, Johns recomienda consultar con agencias comunitarias que los ofrecen gratis o a bajo costo. O, mejor aún, acudir a su congregación religiosa donde usualmente los pastores o sacerdotes pueden dar asesoría similar a la que ofrecen terapeutas profesionales.
“Muchas de estas personas están adiestradas para ayudar a los demás. O podría ser que en su iglesia haya grupos de asistencia mutua”, indicó Johns. También aconseja aprovechar libros de auto terapia y superación personal que se encuentran en bibliotecas públicas.
Aprender del presente y del pasado
Lo más importante como resultado de la actual crisis es ese “llamado de alarma” que, según Johns, los estadounidenses deben tener en mente para no caer en los mismos errores en el manejo de sus finanzas personales.
Ella pone como ejemplo las carencias que experimentaron los estadounidenses en la década de los 1930s durante la Gran Depresión y, una década más tarde, durante la Segunda Guerra Mundial. En ambos períodos, millones de familias aprendieron a vivir con menos dinero y a hacer rendir más los pocos recursos a su alcance.
“Desde entonces, no hemos tenido tiempos realmente difíciles en nuestro país. Y hoy la gente, especialmente los jóvenes, no saben cómo vivir sin todas las cosas que ellos tienen ahora”, lseñaló Johns.
“Desafortunadamente, las personas confunden lo que desean con lo que necesitan. Necesitamos comer, pero no necesitamos comer filetes de carne; podemos comer frijoles”, lamentó la especialista de Extensión Cooperativa de la UC.
Johns enfatiza la necesidad de ahorrar, como mínimo, 10% de los ingresos familiares para tener recursos económicos en casos de emergencias como la crisis financiera por la que atravieza el país. De la misma forma, recalca que las medidas que se tomen para salir de ella no deben adoptarse sólo mientras dura la crisis.
"Yo pienso que cuando volvamos a la normalidad, ésta no va a ser la normalidad a la que estábamos acostumbrados", dijo. "La gente va a tener que comenzar a ahorrar y a dejar de comprar cosas que no necesitan. Ydeberán dejar de gastar de más".
Extensión Cooperativa de la Universidad de California imparte clases gratuitas en casi todos los condados del estado en las que se enseña cómo preparar comidas nutritivas y económicas, y cómo hacer rendir más el dinero. Para más información, contacte la oficina de UCCE en su condado. En las páginas blancas de su guía telefónica busque: Cooperative Extension, bajo el rubro County Government.
Encuentre más información relacionada con finanzas personales en el sitio Web de Información en Español de la UC (http://espanol.ucanr.org), bajo:
Y también en el sitio Web de la UC, Money Talks – Agarra la onda…¡Cuida tu dinero!: http://www.moneytalks.ucr.edu/