Aug 1, 2012
Comprar productos comestibles listos para servirse, o que sólo requieren unos pasos más para terminar su preparación es una gran conveniencia. Pero, en términos generales, la comida congelada, ya preparada o semi-preparada resulta mucho más costosa que la que podría hacer en casa y a su gusto.
Seleccionando bien los ingredientes gastará menos dinero y sus platillos tendrán menos sal, azúcar y grasa que la comida procesada y que, en cuestión de salud, tiene un costo mucho más elevado.
Mensaje de la Universidad de California.