UC busca atraer a estudiantes hispanos a sus escuelas de medicina
“Toda mi vida tuve problemas de salud, vivo con un riñón y cuando estaba creciendo vi muchas veces que mi familia tenía problemas para navegar en el sistema médico en este país”, dice Javier Prieto, estudiante del segundo año de la escuela de medicina de UCR.
Problemas como el de Prieto de 25 años, son muy comunes entre la comunidad latina que se enfrenta a la falta de médicos que hablen su idioma y entiendan su cultura. UCR sabe esto y por eso el 30 de septiembre con motivo del Día Nacional del Médico Latino y del mes de
la Herencia Hispana se llevó a cabo la primera conferencia para atraer a más estudiantes latinos a la escuela de medicina.
En California con una población de casi 40 millones de personas, en donde el 39% es de origen latino, únicamente el 6 % de sus médicos son de origen hispano, un factor que afecta a la comunidad que tiene el español como primer idioma.
“Estamos celebrando el Día Nacional del Médico Latino, queremos incrementar el número de estudiantes latinos en las escuelas de medicina”, dice la doctora Evita Limón-Rocha, psiquiatra y directora del Comité de Admisiones de la Escuela de Medicina de UCR, “los grupos latinos están subrepresentados, no hay médicos latinos por eso es tan importante esta conferencia”.
No solo los médicos latinos son pocos, también el número de doctoras latinas en todo California es muy bajo representando únicamente el 2.4 por ciento de los médicos estatales.
“Casi el 40 por ciento de los residentes de California son de origen hispano y únicamente el 2.4 por ciento son mujeres”, dice la doctora Limón-Rocha, quien se dio a la tarea de organizar la conferencia.
Limón-Rocha es egresada de UCR y recuerda que cuando estaba pequeña sentía una fascinación por el cuerpo humano. “Desde niña me gustaba mucho la ciencia y al ver que mi familia no podía comunicarse con los doctores, decidí que iba a estudiar para ser doctora”.
En el evento al que asistieron alrededor de 100 personas entre estudiantes, personal académico y médicos quedaron en claro algunas de las necesidades que tiene la comunidad dentro del campo de la salud.
Un esfuerzo estatal
No solo UCR está haciendo algo para atraer a más estudiantes latinos al campo médico, la Escuela de Medicina de la Universidad de California en Davis cuenta con el programa Prep Médico, un programa diseñado en conjunto con Kaiser Permanente para que más estudiantes de origen hispano se acerquen a la universidad.
El objetivo del programa es identificar a las siguientes generaciones de médicos y otros profesionales de la salud comprometidos con la mejora de la salud de los latinos.
Prep Médico es un programa en el que los estudiantes cuentan con mentores que les ayudan a navegar en el sistema de la salud.
El programa comenzó en 2016, los participantes son en su mayoría estudiantes del primer y segundo año de colegio del norte del estado y del valle central que están explorando carreras en el área de la salud que les permitan servir a las comunidades latinas.
Los estudiantes participan en clases, son voluntarios en una clínica médica y dos veces a la semana se convierten en la sombra de un médico.
Se enfrentan a problemas
Los estudiantes se enfrentan a una serie de obstáculos para cursar la carrera de medicina, entre ellos el financiero, puesto que medicina es una de las carreras más largas y costosas.
“El dinero es uno de los problemas principales, cuesta mucho ir a la escuela de medicina y hay mucha gente que piensa que tienen que limitar sus sueños porque no tienen el dinero”, explica Jessica Muñoz doctora residente en el Centro Médico de la Universidad de Loma Linda.
“Otro problema es que no hay gente que se parezca a nosotros en estas posiciones (médicas)”.
La doctora Muñoz explica que otra de las problemáticas es el idioma. “Hay muchos pacientes que no utilizan intérpretes en sus citas con el doctor y esto los lleva a no entender bien cómo tomarse sus medicamentos y a no entender qué es lo que pasa con sus tratamientos”, explica, “los pacientes me dicen, no me explicaron, no sé qué me paso, es ahí cuando yo puedo explicarles en su lenguaje”.
La doctora Verónica Torres, medico familiar en Kaiser Permanente tiene la misma opinión que la doctora Muñoz.
“Entrar a la escuela de medicina es sumamente difícil, uno tiene que ir a la universidad después son tres años y dependiendo de la especialidad unos años más, hay que estudiar mucho y es muy costoso”, dice Torres. “Algunas escuelas cuestan hasta 60,000 dólares por año”.
Prieto, estudiante del segundo año de medicina, considera que ser la primera persona en su familia que sigue el camino de la medicina es una de las barreras a las que se ha tenido que enfrentar.
“Hay familias que han hecho medicina toda la vida y para nosotros los latinos hay muchos casos que somos los primeros en ir a la universidad, hay muchos pasos que tenemos que seguir y no tenemos un ejemplo en la familia”.
Más mujeres
Diana Ortiz y Joselyn Santana estudian el segundo año de medicina en UCR, ellas no solo quieren aumentar la plantilla de médicos latinos sino también quieren incrementar el porcentaje de mujeres latinas en este campo en el que en California únicamente el 2.4% son mujeres.
Ortiz de origen inmigrante, es la primera mujer en su familia en asistir a la universidad. “Somos inmigrantes y mi familia está muy orgullosa”, dice Ortiz, “Soy la primera mujer en estudiar medicina y en ir a la universidad”.
Para Santana el apoyo de la familia y la comunidad es muy importante para salir adelante.
“Mis padres son inmigrantes, yo soy primera generación de doctora”, explica Santana quien mes con mes acude a una clínica en Coachella a ofrecer sus servicios. “El apoyo que nos da la comunidad es muy importante. La gente nos dice ‘échale ganas mija'”.