SANTA ROSA- (UC) – Una nueva plaga que ya ha causado pérdidas millonarias en el Este del país podría ser motivo de preocupación para los agricultores californianos; el insecto, que afecta a una amplia variedad de cultivos, ya se ha establecido en Los Ángeles.

La plaga en cuestión es la chinche apestosa marrón marmórea (Brown Marmorated Stink Bug, BMSB). Este insecto ataca fruta madura como el durazno, manzana, pera, ciruela y uvas, pero también le gustan algunas verduras como los chícharos, maíz y tomate.

Es un insecto muy destructivo que viene de Asia; entró a los Estados Unidos por el área del este, procedente de  China, Taiwán, Japón o Corea. “Se le detectó por primera vez en Pensilvania a finales de los 90 y, desde entonces, se ha ido trasladando por todo el noroeste del país”, indica Lucía Varela, especialista en control integrado de plagas de Extensión Cooperativa de la Universidad de California.  

En el Este del país ya ha causado pérdidas millonarias, especialmente entre los agricultores de manzana y el peligro que representa para la agricultura de California es enorme por varias razones:

1. Le gusta comerse la fruta,
2. Se reproduce en grandes cantidades y
3. Hasta el momento no hay método seguro para su control. 

“Sabemos que la chinche está en Los Ángeles, pero no ha llegado a la parte agrícola de California. Pero el miedo es que empiece a expandirse desde Los Ángeles y que llegue a áreas agrícolas ya que, por lo general, la expansión se ha visto que comienza en ciudades”, señala Varela.

Aunque el insecto puede volar, su forma usual de transportarse es en cajas, muebles o autos. “El riesgo es muy alto porque se mueven fácilmente en muebles, en cajas que han estado en depósito y en donde ha entrado el insecto, y se pegan a vehículos y así se trasladan fácilmente de un sitio a otro”, explica Varela.  

“Ahora que el insecto está en Los Ángeles, el riesgo ha aumentado considerablemente de que empiece a moverse al  Valle Central y otras regiones agrícolas; y una vez establecido, el control no es fácil”.

“Se mueve mucho de cultivo en cultivo y se multiplica en grandes números”, explica la especialista. “Los insecticidas que se tienen que usar para controlarlos son pesticidas bastante tóxicos, y en los últimos veinte años hemos tratado de usar insecticidas suaves para no causar más problemas al medio ambiente. Algo que hemos notado, especialmente con el uso de algunos insecticidas piretroides, es que pareciera que los insectos se caen pero a las tres o cuatro horas reviven o sea que no les afecta mucho; o sea que las herramientas para controlarlas son pocas y son muy tóxicas,” enfatiza  Varela.

Los vinicultores de California también están preocupados de que la plaga llegue a la cosecha de la uva y pudiera perjudicar la producción vinícola. “La chinche apestosa tiene una glándula que emana un olor desagradable y entra, en grandes números, dentro de los racimos y al cosechar la uva, se cosechan los insectos también”, señala Varela. “Y cuando se exprime el jugo para hacer vino se exprime también el insecto, emanando ese olor feo que arruina el vino”.  

Y aunque el insecto no pica a los humanos ni representa un problema serio para la salud, se ha convertido en una pesadilla para propietarios de casa. ”A este insecto le gusta congregarse en estructuras para evitar el frío. Yo he visto personas barrer los insectos, llenando baldes de hasta cinco galones con chinches. Limpiar es una molestia grande, pero no causa problemas de salud”, precisa Varela.

                           *file114573*

La chinche mide entre 14 a 17 milímetros, es jaspeada de color café oscuro, y en las antenas tiene franjas claras y oscuras; estas bandas es lo que la diferencia de otras chinches apestosas. En la boca una especie de aguijón que introduce a la fruta, succionando las células y haciendo el fruto incomible.

Especialistas de Extensión Cooperativa están exhortando al público a que reporten cualquier insecto que pueda parecerse a la chinche apestosa marrón marmórea. Si cree que ha visto a este insecto u otro parecido, se le pide que lo recoja, lo eche en una bolsita de plástico, y lo lleve a la oficina del comisionado de agricultura o a la oficina local de Extensión Cooperativa para que efectúen la identificación apropiada.

La identificación temprana de este insecto es primordial para proteger la industria agrícola de California que asciende a billones de dólares.

Para obtener más información, en inglés, sobre este insecto, visite el sitio del Programa de Control Integrado de Plagas, IPM, de la UC. El Colegio de Ciencias Agrícolas de Penn State ofrece un boletín, en español, sobre este devastador insecto.