TULARE-(UC)— El fin de año se presta para disfrutar de comidas con nuestros seres queridos, con frecuencia en un restaurante. Al igual que con los alimentos que se preparan en casa, el cuidado adecuado que se tenga con las sobras de comida reduce la probabilidad de que se desarrollen bacterias dañinas y nos permite disfrutarlas en casa sin correr riesgo alguno.
“Salir a comer o cenar implica varias decisiones, inclusive cómo guardar lo que sobre”, apunta Cathi Lamp, consejera de nutrición y asuntos de la familia y del consumidor de Extensión Cooperativa de la Universidad de California.
La especialista ofrece cinco recomendaciones respecto al cuidado que hay que tener con las sobras:
Decida qué hacer con los sobrantes. Si no puede refrigerar los sobrantes de alimentos antes de que pasen dos horas desde que le sirvieron la comida, no los lleve a casa. Dos horas es el tiempo máximo recomendable para dejar sin refrigeración los alimentos perecederos, que incluyen la carne, aves de corral y mariscos; los productos lácteos; la pasta, arroz y verduras cocidas, así como las frutas y verduras frescas rebanadas, picadas o sin cáscara.
Considere que una sola bacteria puede convertirse en 32,768 bacterias en cinco horas escasas. Algunas bacterias, como la estaphylococus aureus, pueden originar una toxina resistente al calor que no se puede destruir al cocinar o volver a calentar los alimentos.
Si no quiere dejar las sobras en el restaurante, pero tampoco puede refrigerarlas antes de dos horas, comparta el platillo con alguno de sus familiares o amistades en el restaurante.
Refrigere las sobras adecuadamente. Al llegar a casa, pase las sobras a envases poco profundos. Hágalo sin demora y permita que se enfríen en el refrigerador; no espere a que se enfríen a temperatura ambiente antes de refrigerarlos.
Decida de antemano cuándo comerá los sobrantes de alimentos. La calidad de las sobras no se perderá si si las come en uno o dos días. Si piensa esperar más tiempo, es necesario congelarlas a 0º Fahrenheit.
Congeladas a 0º F, los sobrantes de alimentos pueden permanecer en buen estado por bastante tiempo. Sin embargo, el Departamento de Agricultura de los EE.UU. y el Servicio Federal de Inspección y Salubridad Alimentaría recomiendan que los alimentos mantienen su calidad por unos dos a cuatro meses.
Caliente las sobras debidamente. Al volver a calentar las sobras, asegúrese de que alcancen una temperatura interna de 165º F, a la cual producen vapor. Revuelva para que se calienten muy bien.
Si desea calentar los alimentos que sobraron en el horno de microondas y los refrigeró o congeló en el envase del restaurante, asegúrese de que el recipiente se puede usar en el horno de microondas. A las temperaturas altas de este horno, algunos envases, como los de poliestireno, pueden derretirse, contaminando con sustancias dañinas los alimentos que contienen.
La mejor regla a seguir respecto de las sobras: Si tiene dudas, tire las sobras a la basura. Por ejemplo, si olvidó las sobras en el auto toda la noche, las dejó en el refrigerador una semana o las olvidó todo el día en la mesa o mostrador de la cocina, ¿sabe si todavía están en buen estado y pueden consumirse sin riesgo? Como no es posible ver ni oler la mayoría de las bacterias dañinas, es mejor desechar las sobras.
Aún en el caso de las sobras de los platillos más deliciosos de los mejores restaurantes, si duda de si están en buen estado al llevarlas a casa, refrigerarlas o calentarlas, ¡deséchelas! Evite arriesgarse y poner en peligro la salud de su familia. Así podrán disfrutar usted y su familia de las entrañables fiestas de fin de año sin las molestas y, en ocasiones, peligrosas, enfermedades a causa de alimentos en mal estado.