Con la vista puesta en los esfuerzos por reducir el índice de obesidad infantil y mejorar la salud de los niños en general, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos anunció la regla final para servir bocadillos en las escuelas. La regla, finalizada el 21 de julio, requiere que los bocadillos que se sirven en las escuelas, este de acuerdo a las normas nutricionales similares a los requeridos en las comidas escolares.
Lorrene Ritchie, directora del Instituto de Políticas sobre Nutrición (NPI, por sus siglas en inglés) de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California aplaude la decisión del USDA por su reciente regla final sobre Bocadillos Saludables en las Escuelas, la cual complementa las mejoras sobre nutrición que se han hecho con respecto a los almuerzos y desayunos a través de la Ley de Niños Saludables y sin Hambre (Healthy, Hunger-Free Kids Act).
La creación de ambientes escolares que ofrecen alimentos más saludables tales como frutas y verduras frescas y granos integrales también puede influir en la forma en la que los niños comen en el hogar y fuera de la escuela.
“La investigación, realizada por nuestro Instituto de Políticas sobre Nutrición, ha demostrado que los alimentos y bebidas escolares saludables que consumen los niños tienen un impacto positivo en la calidad de su alimentación en general”, agregó la experta.
El USDA también requiere ahora que cualquier alimento o bebida que se venda dentro de las instalaciones escolares durante el día escolar cumpla con las normas de Bocadillos Saludables. Los niños son el blanco comercial de muchos alimentos y bebidas que contienen unos niveles bajo en nutricional y un contenido alto de calorías que contribuyen al exceso de peso. Para poderse promover en un recinto escolares, los alimentos y bebidas deben cumplir con los mismos estándares de Bocadillos Saludables y sus productos puedan ser vendidos o servidos en las escuelas, de acuerdo a la nueva regla de la Política sobre Bienestar Escolar.
“Hemos empezado a ver que el índice de obesidad infantil se está nivelando en algunos lugares y los cambios en el entorno de la alimentación escolar son esenciales para impulsar este avance”, señaló Ritchie.
Proveer una fuente constante de alimentos nutritivos en las escuelas ayuda a aproximadamente 6.2 millones de estudiantes de K-12 a desarrollar hábitos de alimentación nutritivos para toda la vida.
Para leer más acerca de los cambios federales a los requisitos para las comidas escolares, lea el comunicado de prensa del USDA.