BAKERSFIELD-(UC)— Preparar alimentos en casa y comer en familia en vez de comer fuera no sólo ahorra dinero sino que fomenta la buena salud de toda la familia y hasta tiene un impacto positivo en el desempeño escolar. Además, preparar una rica comida no requiere de mucho tiempo ni de muchos ingredientes.
“Los niños en familias que comen juntos tienen un mejor rendimiento en la escuela”, precisa Margaret Johns, especialista en nutrición y asuntos de la familia y del consumidor de Extensión Cooperativa de la UC. “Los niños donde se come en familia se llevan mejor con otros niños”. Además, los investigadores han descubierto que los niños disfrutan de comer en familia.
Johns brinda algunas recomendaciones para facilitar el proceso de preparar alimentos en casa:
Prepare cantidades suficientes para dos comidas y congele la mitad.
- Use los sobrantes para preparar otro platillo. Por ejemplo, con el pollo que le sobre, prepare un guisado de pollo con verduras.
- Prepare cantidades suficientes para usar parte en otro platillo.
- Use paquetes de mezclas de arroz o pasta, agregue verduras y alguna carne y cocine todo en una olla.
- Tenga a la mano recetas fáciles de hacer que disfrute su familia. Intercambie recetas sencillas con familiares, amistades y compañeros de trabajo.
- Incluya a la familia. Tomen turnos ayudando en la preparación de las comidas.
- Lleguen a un acuerdo de que una vez a la semana, cada quien se procurará su propia cena.
“Las familias que conversan y comparten durante las comidas refuerzan sus lazos familiares”, apunta Johns. Comer en familia es también una manera de enseñar las reglas de la urbanidad y buenos modales a los niños y de que aprendan las tradiciones de sus padres y abuelos.