- Author: Kara Manke, PhD, UC Berkeley Media Relations
A veinte años del inicio de un experimento de la Universidad de California en la Sierra Nevada, investigadores confirman que no existe una solución única para la reducción en los riesgos de incendios forestales catastróficos en California, ya que la efectividad es mayor cuando se combinan estrategias como las quemas controladas y el raleo de restauración.
Estos tratamientos también mejoran la vitalidad de los bosques, incrementando la resiliencia de los árboles ante condiciones de estrés como las sequías y el ataque de los escarabajos de la corteza y no tienen un impacto negativo en la biodiversidad vegetal o vida silvestre, reveló la investigación. Los resultados del experimento, llamado Estudio del Sustituto del Fuego, se publicaron en línea en el diario Ecological Applications.
"La investigación es bastante clara en que estos tratamientos son efectivos — muy efectivos", mencionó Scott Stephens, autor principal del estudio quien es profesor de ciencias del fuego en la Universidad de California, Berkeley. "Espero que esto permita que la gente sepa que existe una gran esperanza de llevar a cabo estos tratamientos a escala, sin consecuencias negativas".
El año pasado, California anunció un plan estratégico para expandir el uso de incendios controlados a 400 mil acres anualmente para el 2025. Sin embargo, el uso del fuego benéfico continúa enfrentándose a múltiples obstáculos, incluyendo la falta de una fuerza laboral capacitada, la necesidad de condiciones climáticas específicas para llevar a cabo las quemas y el miedo sobre riesgos potenciales.
El estudio muestra además que el raleo de restauración también es una opción viable para el manejo de los bosques y puede ser usado en conjunto con el fuego benéfico sin dañar la vitalidad de los bosques o la biodiversidad.
"Nuestros resultados muestran que no existe una sola solución — hay varias cosas que pueden hacerse para impactar el riesgo de un incendio catastrófico", dijo Ariel Roughton, coautor del estudio y gerente de la estación de investigación en los bosques de Berkeley. "Las personas pueden elegir entre diferentes combinaciones de tratamientos que se adapten a sus necesidades y nosotros podemos mostrarles cómo esos tratamientos podrían tener un impacto en cosas como la conducta de un incendio forestal, el crecimiento de árboles y la retención de carbono en sus bosques".
Sustitutos de los incendios forestales
Stephens y otros investigadores de Berkeley Forests han usado, durante las últimas dos décadas, las quemas controladas, raleo de restauración o una combinación de ambos para tratar parcelas boscosas en la Estación de Investigación Forestal Iodgett, un bosque experimental de cuatro mil acres ubicado aproximadamente a 65 millas al noreste de Sacramento en las tierras no cedidas del pueblo de Nisenan.
El estudio Sustituto del Fuego fue uno de 13 estudios realizados en Estados Unidos que se llevó a cabo por primera vez en 1999 con fondos del programa U.S. Joint Fire Science. Su objetivo era determinar si los dos tratamientos podían imitar el impacto benéfico de los incendios y prácticas de quema de los indígenas en los bosques de California, los cuales han acumulado una vegetación densa tras un siglo de supresión de incendios.
"Los incendios prescritos y el raleo de restauración son ambos sustitutos de incendios forestales, un importante proceso que sucedía frecuentemente en California antes de la colonización europea", señalo Stephens. "El ímpetu de este estudio fue: ¿si van a implementar estos tratamientos a gran escala, hay algo que perder"?
El estudio creó nueve parcelas experimentales y tres parcelas de control en Blodgett. En tres de las parcelas experimentales solo se usaron incendios controlados; tres de los incendios ocurrieron durante el curso de veinte años. Otras tres parcelas experimentales fueron primero sometidas a un raleo y luego quemadas y las últimas fueron tratadas solo con raleo de restauración. Las parcelas de control crecieron sin la interferencia humana excepto por una continua supresión de fuego.
Al final del periodo de 20 años, los investigadores analizaron la vegetación en cada parcela y usaron un modelo informático para calcular cuántos árboles tenían posibilidades de sobrevivir durante un incendio forestal. Descubrieron que los tres tipos de parcelas experimentales fueron significativamente más resilientes a los incendios forestales que las parcelas de control, mostrando un 80 por ciento de posibilidades de que por lo menos un 80 por ciento de los árboles podrían sobrevivir.
También calcularon el "índice de competencia", una medida que muestra que tan fuerte tienen que competir los árboles por recursos como la luz solar, agua y nutrientes de la tierra. Al retirar el exceso de árboles y vegetación con el raleo y quemas, se limita el nivel de competencia entre los árboles, haciéndolos menos vulnerables a estresores, como sequías y los escarabajos de la corteza.
Sin embargo, las parcelas que fueron tratadas con una combinación de raleo y fuego tuvieron los mejores índices de competencia, sugiriendo que los árboles allí podrían ser los más resilientes a los impactos del cambio climático.
El raleo restaurativo puede también traer beneficios financieros: con frecuencia, los árboles más grandes pueden ser vendidos a los aserraderos y los ingresos pueden ayudar a compensar el costo por el manejo de bosques. Durante el curso de veinte años, los tratamientos de Blodgett fueron pagados completamente por ingresos provenientes de la madera.
"Cuando voy a Sacramento y hablo sobre [administración forestal] con los legisladores, la primera pregunta que siempre hacen es sobre el costo", mencionó Stephens. "La gente del gobierno estatal nos dice que no pueden ser la única fuente de apoyo para este trabajo. Por ello, el tema económico es tan importante".
La prueba del fuego
En septiembre del 2022, los bosques de Blodgett estuvieron sujetos a una prueba de la vida real: en la mañana del 9 de septiembre del 2022, el incendio Mosquito atravesó la parte norte de la propiedad, quemando aproximadamente 300 acres antes de ser contenido dos días después.
Una de las parcelas de control del estudio se localizaba directamente en el paso del incendio y más del 60 por ciento de los árboles en esta parcela fueron completamente quemados. Sin embargo, las parcelas experimentales vecinas que habían sido tratadas con quemas controladas sirvieron como “espacios sin combustible” ardiendo con menor intensidad que las de control y sirviendo como áreas de reagrupamiento para los bomberos.
"Creemos que, en general, nuestras acciones administrativas, junto con el clima, tuvieron un gran impacto en la conducta del fuego", dijo Roughton.
Los investigadores recibieron un subsidio de cuatro años por parte de Joint Fire Science Program (Programa Conjunto de Ciencias del Fuego) para continuar el Proyecto Sustituto del Fuego. Con la ayuda del subsidio han establecido una nueva parcela de control para reemplazar la que se quemó y planean aplicar un cuarto incendio a las parcelas experimentales solo para quemar.
También colaboran con la Comunidad Indígena de Auburn para reestablecer las quemas culturales indígenas en Blodgett.
"Queremos ser parte de la solución y esa es parte de nuestra misión en Blodgett", indicó Roughton. “Esperamos que al realizar estos estudios y traer a las personas aquí para que vean los efectos de los diferentes tratamientos regresarán y los aplicarán en las tierras que van a administrar".
Otros coautores del estudio son Daniel E. Foster, John J. Battles, Alexis A. Bernal, Brandon M. Collins, Rachelle Hedges y Robert A. York de UC Berkeley y Jason J. Moghaddas del Grupo de Informática Spatial. Este Proyecto fue financiado originalmente por el Programa Conjunto de Ciencias del Fuego de Estados Unidos y ha recibido el apoyo adicional del California Fourth Climate Change Assessment, el Programa McIntire-Stennis, el California Greenhouse Gas Reduction Fund y el UC UC Laboratory Fees Research Program de la Oficina del Presidene de UC. Igualmente, importante para mantener este estudio active fue la participación de Smart Practices and Architecture for Prescribed Fires in California.
Usted puede ver más fotos en la publicación original en https://news.berkeley.edu/2023/12/12/twenty-year-study-confirms-california-forests-are-healthier-when-burned-or-thinned.
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés. Editado para su publicación al español por Diana Cervantes
- Author: Grace Dean
Los dueños y administradores de propiedades forestales cuentan con una nueva herramienta digital que les permitirá aprender de las experiencias y estrategias que les han funcionado a expertos y a otros propietarios en el cuidado y protección de zonas boscosas.
Conocida en inglés como ‘story map' (mapa narrativo), esta herramienta consiste en una plataforma digital en la que los interesados pueden encontrar videos e historias a través de los cuales expertos en recursos naturales, dueños y administradores de tierras forestales comparten sus experiencias y conocimientos sobre el tema.
Desde hace cuatro años, Kim Ingram, coordinadora de Educación sobre Administración Forestal del Departamento de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California (UC ANR), ha escuchando a los propietarios de bosques privados que participan en sus series de talleres sobre administración forestal. Los propietarios de tierras comparten entre si sus experiencias sobre la remoción de escombros, control de plagas invasivas y replantación después de un incendio forestal. Pero una de las cosas que más preocupa a todos ellos, es quién cuidará de sus bosques cuando ellos se hayan ido.
Para aliviar un poco las preocupaciones de quienes asisten a sus talleres, Ingram recurre a los profesionales de recursos naturales de CAL FIRE, los Distritos de Recursos de Conservación y el Servicio Forestal de Estados Unidos, los cuales comparten sus conocimientos y recursos con los participantes. Pero recientemente, Ingram desarrolló un ‘story map' que permitirá a los propietarios de tierras forestales contar con una plataforma en la que puedan compartir sus experiencias y las estrategias que utilizan para la administración de sus propiedades.
"No es raro que los pequeños propietarios forestales se sientan abrumados con sus responsabilidades administrativas forestales e inseguros sobre cuáles pasos deben llevar a cabo primero”, dijo Ingram. "Esperamos que, a través de los talleres sobre administración forestal y este proyecto de story map podamos mostrar que existe toda una comunidad de propietarios forestales en la misma situación, aprendiendo uno del otro y avanzando hacia sus objetivos administrativos".
El equipo responsable del Story Map para una Administración Forestal usó los ArcGIS StoryMaps para diseñar el proyecto, en el cual 15 participantes ofrecen entrevistas y contenido visual. StoryMaps ofrece una interfaz fácil de usar en la que los visitantes del sitio web pueden hacer clic en un condado para ver entrevistas específicas o desplazar la pantalla para ver las historias que allí se presentan.
El equipo forestal planea entrevistar por lo menos a un propietario y un profesional de recursos naturales en cada uno de los condados forestales de California para que así los propietarios privados puedan contar con un contacto local o se sientan inspirados por un proyecto en su área.
La plataforma digital no solo es una fuente de conocimiento, sino que ahora también funciona como una red de conexiones en la que los propietarios pueden buscar la asistencia de profesionales.
Theresa Ciafardoni, propietaria forestal del condado de Nevada, indicó que el Taller de Administración Forestal de UC ANR le ayudó a manejar la restauración de sus tierras tras un incendio y planificar el uso a largo plazo de las mismas.
"Abrió tantas opciones y posibilidades", dijo Ciafardoni. "Todos los individuos que se presentaron durante el Taller de Administración Forestal accedieron a tomar llamadas con preguntas específicas y ofrecieron asistencia técnica invaluable".
Los ponentes anteriores del mismo taller compartieron su información de contacto y lo que los motiva a llevar a cabo su trabajo como administradores de bosques para que los propietarios interesados puedan encontrar asistencia en sus áreas. Los profesionales que aparecen actualmente en el story map son los gerentes del Distrito de Recursos de Conservación, asesores forestales de UC ANR y contratistas privados.
"Los propietarios más motivados no solo invierten económicamente, si no que ponen el corazón en ello”, manifestó Ryan Tompkins, asesor forestal de Extensión Cooperativa de UC para los condados de Plumas, Sierra y Lassen. "El mundo natural está lleno de incertidumbre, pero ellos están comprometidos a continuar educándose y aprender a ser buenos administradores de tierras. Se requiere un cierto nivel de humildad y reconocer que nuestro mandato como administradores de la tierra representa un periodo muy breve en la vida de un bosque".
Mirando al futuro, el equipo visualiza el mapa como un documento de trabajo que eventualmente incluirá entrevistas con miembros de tribus indígenas, quienes se enfocan en proyectos de conocimientos ecológicos tradicionales. Asimismo se contará con entrevistas e información del Programa de Resiliencia Después de un Incendio (UC ANR Postfire Forest Resilience Program), y una nueva función que permitirá filtrar las historias por temas (como reforestación o quemas prescritas).
"Este no es un proyecto que puede hacer una sola persona", explicó Grace Dean, especialista en comunicaciones sobre administración forestal. "La misma forma en la que Kim y otros presentadores explican la administración de bosques como un proceso de colaboración, se aplica a este proyecto".
El Taller de Administración Forestal le permite a los participantes iniciarse como principiantes e ir poco a poco incrementando sus conocimientos y experiencia. En el mismo sentido, el story map ofrece al equipo de administración forestal una base sólida de historias reales a la que se pueden agregar otras con el tiempo. Se espera que la misma se convierta en una herramienta multifacética que llegue a nuevos propietarios forestales y eventualmente envuelva sus historias dentro de su pequeña comunidad.
Para ver el story map para una Administración Forestal, visite: https://storymaps.arcgis.com/stories/bd062108d9894da7920d7aef06fe2c2c.
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés.
Editado para su publicación por Diana Cervantes
- Author: Rachelle Hedges, Project and Policy Analyst for Berkeley Forests
- Adaptado al español por: Norma De la Vega
En la actualidad, cuando los incendios forestales alcanzan dimensiones cada vez más impresionantes, arrasando con miles de árboles que arden en la alta intensidad del fuego, expertos de la Universidad de California han estado analizando cuáles son los factores ambientales que podrían ayudar a predecir la intensidad que puede alcanzar un siniestro.
Scott Stephens de Ciencias del Medio Ambiente de UC Berkeley y otros colegas, seleccionaron para su estudio al incendio de Creek, que tuvo lugar en el 2020 en la Sierra Nevada del Sur porque fue un fuego masivo. Se encuentra entre los más catastróficos en la historia de California, arrasó con 853 construcciones, y los esfuerzos para su extinción se elevaron a 193 millones de dólares, además que tomó varios meses apagarlo.
Los expertos reunieron una combinación de datos terrestres y de teledetección, para analizar causas, condiciones y comportamiento de este incendio y encontraron que:
- La biomasa muerta, toda la materia orgánica de árboles y arbustos que se convierten en combustible y
- La densidad de árboles vivos, es decir áreas donde hay más árboles que compiten entre sí por los recursos naturales, fueron los dos factores ambientales más importantes, más allá que la tala de madera en los bosques o los métodos utilizados para reducir los riesgos de incendios, o el historial de incendios y la topografía.
A mayor cantidad de biomasa seca y densidad de los árboles corresponde mayor probabilidad de que ocurra un incendio masivo.
“La restauración forestal debe incrementarse grandemente en los bosques de California, el incendio de Creek nos muestra que es lo que pasa si no actuamos de manera decisiva”, indicó Stephens, principal autor del trabajo, publicado en un nuevo artículo en el Forest Ecology and Management.
Un análisis adicional reveló que, no obstante que los primeros dos días del incendio Creek fueron anormalmente calientes y secos, particularmente, el clima en los días en los que creció más el incendio estuvo en el rango normal de la temporada a finales de verano. Sin embargo; la distribución espacial de la intensidad del incendio durante esos días, mostró rangos notables en la concentración de calor, registrándose el fuego en la ubicación opuesta de donde se esperaba. Específicamente, en el día en el que el incendio creció más (6 de septiembre), no solo se vio la mayor concentración de calor alejado del perímetro del incendio (o “frente en llamas”, en donde se espera que hubiera la mayor concentración de calor), pero una cantidad de calor importante, se seguía generando en el perímetro del incendio el día anterior.
Este resultado es crítico para poder entender mejor cómo los modelos de conducta tradicionales del fuego podrían o no predecir de manera acertada las conductas de los incendios en los bosques que tienen áreas extensas de árboles secos y una alta densidad de árboles vivos. Lo que es la condición de combustión, cada vez más común, en los bosques de Sierra Nevada.
Así, el incendio de Creek es uno de varios incendios que muestran lo vulnerables que son los bosques bajo las condiciones actuales con incendios forestales frecuentes, con una alta mortalidad de árboles que se convierten en una enorme cantidad de combustible capaz degenerar en incencios devastadores, condiciones bajo las cuales la recuperación futura de los bosques es algo cuestionable.
El estudio, titulado “Mass Fire Behavior Created by Extensive Tree Mortality and High Density Not Predicted by Operational Fire Behavior Models in the Southern Sierra Nevada,” (Conducta de los incendios masivos debido a una extensa mortalidad y densidad de árboles que no es predecible por modelos operativos de conductas de incendios en el sur de Sierra Nevada) se publicó el pasado 16 de mayo en la revista en línea Forest Ecology and Management.
Los autores del estudio son:
- Scott Stephens, Departamento de Ciencias del Medio Ambiente, Política y Administración, Universidad de California en Berkeley.
- Alexis Bernal, Departamento de Ciencias del Medio Ambiente y Política y administración, de la Universidad de California en Berkeley.
- Brandon Collins, Departamento de Ciencias del Medio Ambiente, Política y Administración y el Centro para la Investigación de Incendios y Alcance, Universidad de California en Berkeley.
- Mark Finney, Servicio Forestal de la USDA, Estación de Investigación de Rocky Mountain.
- Chris Lautenberger, Reax Engineering