- (Public Value) UCANR: Developing a qualified workforce for California
- Author: Ricardo A. Vela
Jesús Peña, recientemente obtuvo su título de doctorado en microbiología de la Universidad de California en Riverside, y su motivación para estudiar una carrera en ciencias la decidió desde muy joven gracias a las pláticas y enseñanzas que obtuvo de sus padres.
“Mi familia jugó un papel importante en mi decisión de dedicarme a la ciencia. Mi papá creció en México y quería ser profesor de ciencias, pero no tenía acceso a esas oportunidades”, comenta Peña. “Él y mi madre me animaron a sentir curiosidad por el mundo, el medioambiente y compartir ese conocimiento con otros en mi comunidad”, dijo el joven científico latino.
Aunque cada día aumenta más la participación de los latinos en las carreras científicas, este grupo continúa estando subrepresentado en el ámbito laboral. Un nuevo informe del Centro de Investigación Pew indica que hace faltan que haya más representación de latinos en las carreras y campos de ciencia, tecnología ingeniería y matemáticas (STEM) para atraer a más jóvenes hispanos a esas carreras.
Y para aquellos que logran la meta, los recién graduados como Peña, enfrentan un duro golpe cuando empieza su búsqueda por un empleo. De acuerdo con el reporte están claramente subrepresentados entre las filas de los científicos y aquellos en profesiones afines. Los adultos hispanos representan el 17% de la fuerza laboral de los Estados Unidos, pero solo el 8% de los trabajan en un empleo de ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas (STEM).
“Es importante que los latinos se unan a la fuerza laboral científica, ya que somos uno de los muchos grupos que contribuyen a la ciencia a través de los impuestos, debemos estar representados entre los grupos que realmente están haciendo el trabajo, es decir, los científicos”. dijo Peña.
Los latinos es uno de los grupos étnicos de más rápido crecimiento en la nación. En California el 39.4% de la población es hispana y a nivel nacional, los latinos suman 62.1 millones en 2020, lo que representa el 19% de todos los estadounidenses, es decir es el segundo grupo étnico más numeroso en el país, según la Oficina del Censo de los Estados Unidos.
De ahí que aumentar a los latinos en las filas de las ciencias es un enorme reto que ha sido abordado por varios científicos de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California, UCANR desde diferentes perspectivas.
Jairo Díaz, director del Centro de Investigación del Desierto de UCANR, en donde se desarrollan varias investigaciones sobre cómo producir los alimentos utilizando menos agua, muchas otras investigaciones, dijo que en ese centro cuenta con programa comunitario que invita a grupos de estudiantes latinos de diferentes grados escolares a participar en actividades para poner en práctica la aplicación de la ciencia en la agricultura.
“Involucro a los jóvenes en temas de Ciencia utilizando factores locales relevantes. Obtengo subvenciones que brindan oportunidades de pasantías a estudiantes universitarios para obtener nuevos conocimientos y habilidades necesarias para tener éxito en las carreras científicas”, señala Díaz.
Mientras que Carmen Gispert, entomóloga de Extensión Cooperativas en los condados de Riverside, Imperial y San Diego pone su interés en promover las carreras científicas especialmente entre mujeres.
“He servido como mentor de estudiantes de secundaria, y los he alentado a seguir una carrera en ciencias. Los padres de muchos de estos estudiantes eran trabajadores agrícolas.
He estado particularmente interesada en motivar a las jovencitas, contándoles sobre mi experiencia personal en una carrera en ciencias dominada por hombres”, comenta Gispert.
Liliana Vega, asesora de desarrollo juvenil de CA 4-H de la Extensión Cooperativa del condado de Santa Barbara, ha puesto en marcha un programa llamado “Chispa” o “Career Spark” por su nombre en inglés en el cual mensualmente destacan a los profesionales latinos y discuten con los estudiantes sus caminos, las barreras que enfrentaron al optar ir a la universidad y las carreras en STEM.
En 2015, UCANR implementó la conferencia anual “Juntos” que forma parte de la Iniciativa Latina de UC ANR que tiene el objetivo de aumentar el número de latinos en la educación superior y en las ciencias. en la conferencia los jóvenes estudiantes latinos de todo California conviven por varios días en un Campus Universitario. Ellos experimentan de primera mano lo que significa estudiar en una universidad, además de que se ofrecen pláticas con profesionales latinos de diversas áreas para estimularlos a continuar con sus estudios universitarios e ingresar a una carrera en STEM.
Asimismo, hace unos años se implementó el programa 4-H Water Wizards, patrocinado por el Departamento Federal de Agricultura o USDA que tiene como objetivo que los estudiantes de bajos recursos latinos y afroamericanos, tengan acceso a la ciencia práctica desde temprana edad a través de actividades que desarrollan con científicos de UC ANR latinos que hablen en su idioma y se identifiquen con ellos.
Claudia Díaz-Carrasco asesora de desarrollo juvenil de 4-H es parte de la Iniciativa Latina y ha recibido numerosos reconocimientos por su compromiso de promover las carreras científicas entre latinos. Ella ve con optimismo los logros realizados hasta ahora.
"Me asocié con el superintendente de escuelas de San Bernardino a través de su división de aprendizaje ampliada. Hemos estado colaborando desde 2019 para crear un centro STEM para programas extracurriculares en la región. Este proyecto en equipo ha servido para inspirar a la próxima generación de científicos e ingenieros en el sur de California”, dijo Díaz-Carrasco.
Desde 2010, ha habido una proporción creciente de estudiantes hispanos que asisten y se gradúan de la universidad, así como un aumento en el número de estudiantes que obtiene una licenciatura en un campo STEM. Aun así, los s hispanos siguen estando subrepresentados entre los graduados universitarios en ciencias.
El reporte del Centro de Investigación Pew dice que los jóvenes hispanos serían al menos un poco más propensos a obtener títulos universitarios en STEM si tuvieran un maestro de STEM de secundaria que fuera latino.
Samuel Sandoval-Solís, profesor asociado de la Universidad de California Davis – UC Davis y especialista en Extensión Cooperativa en Recursos Hídricos, señala que la contratación de científicos latinos es un problema recurrente en instituciones educativas y si bien se ha avanzado, los pasos son lentos.
“En los diez años que llevo enseñando en UC Davis, muchas veces los alumnos mencionan que soy su primer profesor de ciencias que es hispano, por lo que no se sienten representados en el cuerpo docente. Si bien estos pueden ser pequeños esfuerzos, creo que lenta pero seguramente los jóvenes de nuestra comunidad hispana están reconociendo que es posible ser un científico, eso es genial para nuestros jóvenes”, comentó Sandoval Solís.
- Author: Ricardo A. Vela
Jesús Peña recently earned his doctoral degree in microbiology from the University of California, Riverside. His motivation to study a career in science was decided from a very young age thanks to talks and teachings from his parents.
"My family played an important role in my decision to pursue science. My dad grew up in Mexico and wanted to be a science teacher, but he didn't have access to those opportunities," says Peña. "He and my mother encouraged me to be curious about the world and the environment and share that knowledge with others in my community," said the young Latino scientist.
Although the participation of Latinos in scientific careers is increasing every day, this group continues to be underrepresented in the workplace. A survey conducted by the Pew Research Center indicates that Latinos need more representation in science, technology, engineering, and math (STEM) careers and fields to attract more young Hispanics to those careers.
"Latinos need to join the scientific workforce because we're among the many groups contributing to science through taxation. We must be represented among the workgroups, that is, the scientists." Peña said.
Latinos are one of the fastest-growing ethnic groups in the nation. In California, 39.4% of the population is Hispanic, and nationally, Latinos total 62.1 million in 2020, representing 19% of all Americans. That is, it is the second-largest ethnic group in the country, according to the United States Census Bureau.
Hence, increasing Latinos in the ranks of the sciences is a huge challenge that is being addressed by several scientists in University of California Agriculture and Natural Resources, UC ANR, from different perspectives.
Jairo Díaz, director of the UCANR Desert Research and Extension Center, oversees a community program that invites groups of Latino grade school to college-age students to participate in activities that apply science in agriculture at Desert REC, where several experiments are underway to produce food using less water, among other studies.
Carmen Gispert, an entomologist at Extension Cooperatives in Riverside, Imperial, and San Diego counties, puts her interest in promoting scientific careers, especially among women.
"I have served as a mentor to high school students and encouraged them to pursue a career in science. The parents of many of these students were farmworkers. I have been particularly interested in motivating young women, telling them about my personal experience in a male-dominated career in science," Gispert said.
Liliana Vega, California 4-H youth development advisor for UC Cooperative Extension in Santa Barbara County, has launched a program called "Chispa" or "Career Spark," in which Hispanic professionals discuss with students their paths, barriers they faced when choosing to go to college, and careers in STEM.
Claudia Díaz-Carrasco, UC Cooperative Extension youth development advisor, is part of the 4-H Latino Initiative and has received numerous awards for her commitment to promoting scientific careers among Latinos. She is optimistic about the achievements made so far.
"I partnered with the San Bernardino Superintendent of Schools through his expanded learning division. We have been collaborating since 2019 to create a STEM center for after-school programs in the region. This team project has inspired the next generation of scientists and engineers in Southern California," Diaz-Carrasco said.
In 2015, UC ANR hosted the first annual conference "Juntos," which is part of UC ANR's Latino Initiative to increase the number of Latinos in higher education and science. At the conference, young Latino students from all over California live together for several days on a University Campus. They experience firsthand what it means to study at a university, in addition to hearing talks from Latino professionals from various disciplines to encourage them to continue their university studies and enter a career in STEM.
A few years ago, the 4-H Water Wizards program was launched, sponsored by the U.S. Department of Agriculture or USDA, which aims to ensure that low-income Latino and African-American students have access to practical science from an early age through activities they develop with UC ANR Latino scientists who speak in their language.
The Pew Research Center reports young Hispanics would be at least slightly more likely to earn college degrees in STEM if they had a high school STEM teacher who was Latino.
Samuel Sandoval Solís, associate professor at the University of California, Davis and UC Cooperative Extension water resources specialist, points out that although progress has been made, hiring Latino scientists is slow in educational institutions.
"In the 10 years I've been teaching at UC Davis, students often mention that I'm their first science teacher who is Hispanic, so they don't feel represented on the faculty. While these may be small efforts, I think slowly, but surely the youth of our Hispanic community recognizes that it's possible to be a scientist; that's great for our young people," Sandoval Solis said.
- Author: Mike Hsu
Expanded from four chapters in the previous edition to 12, the third edition of Pesticide Safety: A Study Manual for Private Applicators aims to be more than just a study guide.
The manual, available for purchase in English and Spanish, provides much more detail on essential processes and procedures that will help keep applicators safe while using pesticides – as well as reduce environmental impacts from misapplication.
Published by University of California Agriculture and Natural Resources in collaboration with the state's Department of Pesticide Regulation, the manual – intended for members of the agricultural community who own, manage or work on farms that use restricted-use pesticides – also includes substantial updates.
The new manual reflects important changes to federal and state regulations since the publication of the previous edition in 2006.
“There are significant regulatory updates which help you stay up-to-date with safety rules and standards – and protect your workers from overexposure to pesticides,” said Lisa Blecker, technical editor of the publication, and currently a pesticide safety educator at Colorado State University.
In addition to emphasizing the broader ecological ramifications of improper pesticide use, the manual includes information on subjects that might get short shrift in other manuals, such as the correct calibration of equipment to ensure accuracy of application.
“All of that is now in the book and fully fleshed out,” Whithaus said. “[Applicators] are going to be able to do that much more effectively using the new book, compared to the old one – it was really hard to be thorough in 80-some pages.”
The new edition – totaling more than 200 substantive pages – also features a more streamlined and user-friendly layout modeled after a sister publication, The Safe and Effective Use of Pesticides, written for commercial applicators.
She highlighted the “knowledge expectations” listed at the beginning of each chapter and in the margins of the book, next to the relevant passages. The statements serve as “visual cues” to help readers learn and retain the material they need to pass California DPR's certification exam for private applicators.
And while the manual functions as an improved study aid for owners, managers and workers who apply pesticides, it doubles as a reference that they can turn to for years to come.
“It's going to be able to serve as a reference manual, as opposed to just a study guide,” Whithaus said. “You really will be able to use this book as a tool to help you do better in managing your land.”
The manual, listed at $29, is available for purchase in English at https://anrcatalog.ucanr.edu/Details.aspx?itemNo=3383 and in Spanish at https://anrcatalog.ucanr.edu/Details.aspx?itemNo=3394.
- Adaptado al español por: Ricardo A. Vela
Ampliada de cuatro a 12 capitulos, la tercera edición de Seguridad en el uso de Pesticidas: Un manual de estudio para aplicadores privados pretende ser más que una simple guía de estudio.
El manual, disponible para su compra en inglés y en español, proporciona muchos más detalles sobre los procesos y procedimientos esenciales que ayudarán a mantener seguros a los aplicadores mientras usan pesticidas, así como a reducir los impactos ambientales de la aplicación incorrecta.
Publicado por University of California Agriculture and Natural Resources en colaboración con el Departamento de Regulación de Pesticidas del estado, el manual, destinado a los miembros de la comunidad agrícola que poseen, administran o trabajan en granjas que usan pesticidas de uso restringido, también incluye actualizaciones sustanciales.
El nuevo manual refleja cambios importantes en las regulaciones federales y estatales desde la publicación de la edición anterior en 2006.
"Hay actualizaciones regulatorias significativas que lo ayudan a mantenerse al día con las reglas y estándares de seguridad, y protegen a sus trabajadores de la sobreexposición a los pesticidas", dijo Lisa Blecker, editora técnica de la publicación y actualmente educadora de seguridad de pesticidas en la Universidad Estatal de Colorado.
Además de enfatizar las ramificaciones ecológicas más amplias del uso inadecuado de pesticidas, el manual incluye información sobre temas que podrían tener poca importancia en otros manuales, como la calibración correcta del equipo para garantizar la precisión de la aplicación.
"Todo eso está ahora en el libro y completamente desarrollado", dijo Whithaus. "[Los aplicadores] van a poder hacerlo de manera mucho más efectiva usando el nuevo libro, en comparación con el anterior, fue realmente difícil ser exhaustivo en 80 páginas".
La nueva edición, que suma más de 200 páginas sustantivas, también presenta un diseño más simplificado y fácil de usar modelado a partir de una publicación hermana, The Safe and Effective Use of Pesticides, escrita para aplicadores comerciales.
Destacó las "expectativas de conocimiento" enumeradas al principio de cada capítulo y en los márgenes del libro, junto a los pasajes relevantes. Las declaraciones sirven como "señales visuales" para ayudar a los lectores a aprender y retener el material que necesitan para aprobar el examen de certificación de California DPR para aplicadores privados.
Y si bien el manual funciona como una ayuda de estudio mejorada para propietarios, gerentes y trabajadores que aplican pesticidas, funciona como una referencia a la que pueden recurrir en los próximos años.
"Va a poder servir como un manual de referencia, en lugar de solo una guía de estudio", dijo Whithaus. "Realmente podrás usar este libro como una herramienta para ayudarte a mejorar en la gestión de tu tierra".
El manual, que se cotiza en $29, está disponible para su compra en inglés en https://anrcatalog.ucanr.edu/Details.aspx?itemNo=3383 y en español en https://anrcatalog.ucanr.edu/Details.aspx?itemNo=3394.
- Author: Norma De la Vega
En la actualidad en medio de un mercado laboral golpeado por la pandemia y una crisis profunda en toda la cadena de la industria alimentaria, es crucial reducir las barreras al empleo y prestar atención al problema del acoso sexual, un problema que se presenta con más frecuencia en empleos de poca paga que son dominados por los hombres como es la agricultura.
Una investigación reciente de la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California UC ANR encontró que 30 por ciento de las trabajadoras en 9 empresas de la industria vitícola en Napa Valley reportaron algún tipo de acoso sexual en su trabajo actual. Son mujeres jóvenes, menores de 40 años, varias de ellas empleadas temporales que suelen trabajar en pequeños grupos a lo largo del campo en donde se escuchan con frecuencia chistes y comentarios sexistas y hostiles.
- El acoso sexual en agricultura es un problema históricamente desatendido que cobra relevancia económica en el contexto actual de la agricultura, industria que está lidiando con escasez de mano de obra.
- La falta de mano de obra es un problema grave, considerado por varios expertos como el reto principal en la producción de alimentos.
- La escasez de trabajadores, migrantes masculinos, sería aún peor sin el aumento de la mano de obra femenina.
“Las mujeres requieren sentirse seguras para ser productivas y con la carencia crítica que se detecta en la mano de obra en la agricultura, esta industria necesita asegurarse de retener a estas trabajadoras”, aseveró Hobbs.
Investigaciones indican que entre 40 y 75 por ciento de todas las mujeres que trabajan en este país han sufrido algún tipo de acoso sexual y esto no ha disminuido desde los 1980s. Aún peor, el problema se presenta con más frecuencia en trabajos de poca paga que son dominados por los hombres.
El acoso sexual es una conducta no deseada que la víctima percibe como algo ofensivo que amenaza su bienestar. “Es una barrera que no solo daña a la víctima sino a otros trabajadores de la empresa y debo añadir que el acoso sexual no es algo que ocurre solo a las mujeres sino también a los hombres, pero este no fue el enfoque de nuestro estudio.” dijo Hobbs.
He aquí las diferentes formas de acoso sexual:
- Acoso por razón de género – chistes, comentarios o historias sugerentes que resultan ofensivos, o un trato diferente por ser mujer (desprecio o ignorar a la mujer)
- Atención sexual no deseada – solicitar una cita o invitar bebidas a pesar que se le dijo que NO. Tocar o manosear a la persona.
- Coerción sexual – sobornar a la empleada a cambio de que participe en un comportamiento sexual, (ofrecer una promoción a cambio de un favor sexual)
- Sexismo Hostil - comentarios o actos que son interpretados por mujeres como sexistas (por ejemplo: “Las mujeres se ofenden con facilidad”; “las mujeres no aprecian todo lo que hacen los hombres por ellas”; “las mujeres exageran los problemas que tiene en el trabajo”.
En la agricultura, la escasez de mano de obra no es un problema nuevo, se ha registrado desde antes de la pandemia y se ha logrado aminorar gracias al aumento de las trabajadoras.
En 2017, los viñedos de Napa Valley que emplean un promedio de 100 mil trabajadores tuvieron una escasez de 12 por ciento de trabajadores y esto hubiera sido peor sin las trabajadoras. “Hay más mujeres trabajando de lo que había hace 20 años y este cambio en el género de los trabajadores que describo en Napa también está ocurriendo en algún grado en la Costa de California”, asegura el experto.
La investigación resalta que entre 2013 y 2016 la proporción de mujeres trabajadoras aumentó en los viñedos de Napa Valley del 10 a 25 por ciento.
En la investigación participaron 195 hombres y 100 mujeres todos hispanos. Las 9 empresas encuestadas tienen más de 50 empleados cada una, en 7 de ellas se utiliza mano de obra subcontratada y en 2 viñedos se emplea directamente a sus empleados. La encuesta se ejecutó en inglés y español. Del 30 por ciento de las mujeres que reportaron sufrir acoso sexual, 9 por ciento reportaron un tipo de atención sexual no deseada y 1 por ciento de coerción sexual.
“El hecho de que el acoso es más frecuente entre las mujeres jóvenes es un indicador de que el acoso es un obstáculo para ampliar la fuerza laboral pues son mujeres que están empezando a trabajar”, resaltó el experto.
Explicó que el porcentaje relativamente bajo de acoso sexual que se encontró en esta investigación en comparación con otras investigaciones, podría deberse al hecho de que la industria vitícola suele ofrecer mejores salarios y mejores condiciones laborales que otros lugares de trabajo.
Hobbs concluye que esta investigación es un acercamiento a un problema laboral complejo que requiere más atención y posiblemente el siguiente paso será analizar el ambiente laboral en general, abordando las actitudes sexistas hostiles de los trabajadores y evaluando a toda la organización, lo que parece ser lo más prometedor para reducir el acoso en la agricultura. “Las condiciones en que actualmente están trabajando las trabajadoras las hace más vulnerables, los entrenamientos ayudan, pero hay cambios que se tienen que ejecutar, básicamente se tienen que hacer cambios en toda la organización”, concluyó el experto.
Recursos adicionales:
Está investigación se ejecutó gracias a la colaboración del
Centro Occidental para la Salud y Seguridad Agrícola, Western Center for Agricultural Health and Safety de la Universidad de California en Davis, organización que ofrece todo tipo entrenamientos en torno a la seguridad agrícola. Como parte integral de este reporte se elaboró un podcast en donde Teresa Andrews, Especialista en Educación y Alcance a la Comunidad del Centro habla ampliamente sobre qué acoso, y qué indica la ley sobre el acoso y qué hacer cuando se ha sido víctima de acoso. He aquí el enlace al podcast.