- Author: Mike Hsu
Instructor del curso para administradores del clima inspira cambios en el condado de Butte
Habiendo crecido en el condado de Butte, Rose Brazil-Few ha sido testigo de la devastación que el cambio climático ha dejado en las comunidades y los ecosistemas a través una severa sequía o mortíferos incendios forestales, incluyendo el de Camp Fire del 2018 que arrasó con Paradise. A través del Programa Administradores del Clima de la Universidad de California, Brazil-Few está tomando acción en su condado – e inspirando a otros a ayudar.
“Al observar de primera mano la situación del medio ambiente en California, todos los días encuentro una razón para trabajar en proyectos de acción climática”, explicó. “Es el trabajo más gratificante que podría estar haciendo ahora mismo”.
Como becaria del California Climate Action Corps (un programa de desarrollo de fuerza laboral afiliada a voluntarios de California), Brazil-Few trabaja en el Consejo del Medio Ambiente de Butte como coordinadora de sustentabilidad comunitaria. La experta indicó que el curso de administradores del clima de UC que ella cursó el otoño pasado – administrado por el Programa Naturalista de California de UC – le enseñó lecciones importantes que pone en práctica todos los días, especialmente en cuanto enmarcar y comunicar la crisis climática.
Brazil-Few ampliará más esas soluciones arraigadas localmente y las oportunidades de administradores del clima cuando empiece a impartir su propia clase de administradores del clima en UC este verano a través del Consejo del Medio Ambiente de Butte.
“Rose es la primera becaria de CCAC en convertirse en instructora del curso de Administradores del Clima como parte de la Vía al Liderazgo que desarrollamos conjuntamente con CCAC”, señaló Sarah-Mae Nelson, coordinadora académica del programa Administradores del Clima. “Esta vía es una oportunidad para que los becarios continúen, como administradores del clima activos, acogiendo la resiliencia comunitaria y del ecosistema en sus comunidades, una vez que sus becas hayan terminado”.
Desde su lanzamiento en el otoño del 2020, cerca de 500 han completado el curso de Administradores del Clima de UC, el cual es impartido por 17 organizaciones aliadas a través de todo el estado. Nelson destacó que, además de la colaboración con CCAC, Administradores del Clima de UC también trabaja con Sustainability Service Corps y con Strategic Innovations Climate Corps (SEI, por sus siglas en inglés) – y está buscando llevar el curso a otros estados.
Graduada en el 2021 de la licenciatura en estudios del medio ambiente de la Universidad Estatal de Humboldt, Brazil-Few señaló que valora el hecho de que el curso de Administradores del Clima de UC inculque un sentido de esperanza, empoderamiento y posibilidad.
“Conozco a algunas personas que se sienten desesperadas porque hay tanto interés en la fatalidad del cambio climático – cuando en realidad puedes encontrar tantos programas y personas en tu comunidad local que están realizando un cambio positivo”, mencionó la experta.
Brazil-Few destaca en su comunidad los esfuerzos conjuntos entre la Butte County Local Food Network (Red de Alimentos Locales del Condado de Butte) y los productores del área, el Traditional Ecological Knowledge (Conocimiento Ecológico Tradicional) compartiendo con Verbena Fields en Chico y el continuo crecimiento del programa de producción de composta de la comunidad – entre muchos otros proyectos.
Todos ellos ilustran un punto clave en el que Brazil-Few hace énfasis cuando diseña su curso de Administradores del Clima de UC: un importante proyecto sobre el clima no es necesario que se produzca a gran escala – toda acción puede darse, literalmente, hasta en el jardín de uno.
“Puede ser fácilmente alcanzable y accesible”, expresó Brazil-Few. “Simplemente con hablar de ello con las personas y entusiasmar a tu comunidad es el primer paso en crear una serie de eventos que eventualmente lleve a un mayor impacto en el cambio climático y ecologismo positivo”.
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés
Editado para su publicación por Ricardo Vela
- Author: Saoimanu Sope - ssope@ucanr.edu
En una región proclive a las sequías como el sur de California, colaborar con la Madre Naturaleza no es solo algo sabio, sino necesario, según Janet Hartin, asesora en horticultura de Extensión Cooperativa de UC para los condados de Los Ángeles, San Bernardino y Riverside, quien además estudia árboles adaptados o listos para el clima.
En el 2020, la gobernadora Newsom lanzó el California Climate Action Corps, empoderando a los californianos para proteger sus comunidades contra el impacto del cambio climático. El llamado a la acción de Newsom enfatiza la necesidad de soluciones a largo plazo y sustentables como la investigación de Hartin, la cual urge al sur de California a cuidar de los árboles existentes y plantar nuevos árboles.
Con la colaboración con el Servicio Forestal de Estados Unidos y otros científicos de Extensión Cooperativa de UC, Hartin se encuentra en medio de una investigación de veinte años para identificar árboles que sean adecuados a las diferentes zonas climáticas de California. Su trabajo ofrece un entendimiento integral sobre los árboles y sus beneficios relacionados a los humanos y salud del medio ambiente, particularmente en estos momentos en que California navega por cambios climáticos con retos cambiantes.
Una de estas preocupaciones son las islas urbanas de calor (UHI, por sus siglas en inglés). Las UHI son áreas en las que el calor es re irradiado del pavimento de hormigón o superficies de asfalto. En las ciudades cubiertas por asfalto, como Los Ángeles, las temperaturas promedio pueden marcar seis grados más arriba que las áreas circunvecinas.
La experta ha trabajado con organizaciones comunitarias para reducir estas islas urbanas de calor, para plantar árboles. En marzo, por ejemplo, Hartin se unió al Distrito de Conservación de Recursos del Inland Empire para incrementar el dosel arbóreo en el Inland Empire.
“Colaboramos extensivamente con ella durante años y sabemos que Janet ha estado desarrollando un concepto a escala regional para conectar a los miembros de las comunidades a árboles apropiados para el clima, junto con el acceso a la asistencia técnica por parte del Programa Jardineros Maestros de UCCE para garantizar la salud y sobrevivencia de los árboles a largo plazo”, mencionó Mandy Parkes, gerente distrital de IERCD.
Los árboles mantienen frescas a las ciudades
“Los árboles pueden enfriar superficies impermeables de 40 a 65 grados”, expresó Hartin. Durante un estudio realizado en mayo y junio del 2021, Hartin descubrió que el asfalto sin sombra puede tener una temperatura de 60 grados mayor al asfalto bajo sombra a finales de primavera y principios de verano en las ciudades de inland y desierto.
Además de proporcionar sombra, los árboles son efectivos en reflejar la radiación solar y enfriar la atmosfera a través de la evapotranspiración. Dado que también absorben y almacenan carbono, los árboles reducen el impacto de la contaminación causada por combustibles fósiles.
“Un árbol de paisaje maduro bien cuidado puede absorber hasta 40 toneladas de carbono durante toda su vida”, dijo Hartin.
En un blog publicado en el 2021, Hartin sugiere que los árboles sean seleccionados en base a su adaptación al “micro clima” en cada paisaje en particular, resaltando los factores a considerar como la sombra, proximidad a los edificios, el espacio necesario por arriba o debajo del suelo, tipo de tierra y fuente de riego. También recomienda, como referencia los mapas de la Zona Climática del Oeste Sunset, haciendo notar que son “más precisas” que las zonas USDA para nuestros climas más cálidos”.
En base al estudio del Servicio Forestal de Estados Unidos que examina el rendimiento de doce especies de árboles para paisajes no plantados pero muy prometedores en UC Riverside, entre los candidatos más favorables se encuentran el sauce del desierto bubba y el mesquite de miel sin espinas maverick por su resistencia a las sequías y el pistache rojo de empuje por su resistencia a las sequías y calor.
Tamara Hedges, directora ejecutiva del Centro Palm Desert de UC Riverside y miembro de la Junta de Directores del Oswit Land Trust, está de acuerdo en que los árboles son importantes para nuestra batalla contra el cambio climático:
“A través de nuestra colaboración con los programas Naturalist y Jardinero Maestro de UC California y muchas otras organizaciones no lucrativas del Valle de Coachella, se esta protegiendo y expandiendo a los ecosistemas naturales y se están creando ambientes frescos a través de la plantación de especies apropiadas. Estos estudios de UC/USFS ha llegado muy lejos en la identificación de nuevas especies de árboles poco representadas".
Consejos generales para plantar
A diferencia de los árboles recién plantados, los árboles maduros deben ser regados de manera infrecuente pero profundamente. Regar con mucha frecuencia puede reducir el nivel de oxígeno en la zona de las raíces y resultar en suelos encharcados propensos a pudrición de la corona y raíces.
Durante el otoño, los árboles solo necesitan un 15 por ciento del agua que requerirían en el verano. Cuando los riegue, mantenga el tronco seco. Debido a que las raíces de los árboles crecen hacia afuera y se encuentran usualmente a un pie de profundidad de la superficie, Hartin recomienda regar el área alrededor del tronco en lugar de regar el tronco. Esto también ayuda a evitar el desperdicio de agua.
“Los árboles que no están adaptados al clima en el que están plantados y que no reciben un cuidado apropiado son mucho más susceptibles a enfermedades y plagas invasivas como el escarabajo barrenador”, indicó Hartin. “Aun la pérdida de un árbol plantado en el jardín frontal puede reducir la sombra significativamente, incrementando la temperatura a su alrededor y reduciendo el ahorro en energía”.
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés
- Author: Janet Hartin
- Adaptado al español por: Ricardo A. Vela
La primavera de 2021 resultó ser una de las más calurosas de California, rompiendo récords de calor en varias ciudades. Fue una oportunidad perfecta para plantar "árboles de paisaje listos para el clima" en ciudades del interior identificadas en un estudio realizado por la Extensión Cooperativa de la Universidad de California en asociación con el Servicio Forestal de los Estados Unidos.
La idea de reunir a grupos comunitarios y voluntarios para mejorar las copas de los árboles que enfrían las islas de calor urbano, que pueden ser más de 50 grados más calientes que las áreas circundantes, en el área de Redlands fue generada por Janet Hartin, asesora de horticultura ambiental de UC Cooperative Extension para los condados de Riverside, San Bernardino y Los Ángeles.
Este proyecto se hizo realidad cuando Mandy Parkes, gerente del Distrito de Conservación de Recursos de Inland Empire, y Shelli Stockton de la Universidad de Redlands recibieron subvenciones del Cuerpo de Acción Climática para iniciar un vivero y obtener los "árboles de paisaje listos para el clima" listos para plantarlos. Hasta la fecha, se han plantado casi 100 árboles del estudio, incluidos más de 40 en el Complejo Deportivo Redlands.
Según Parkes: "El proyecto avanza rápidamente debido al excelente trabajo de los Becarios de Acción Climática; inspirar la investigación y el apoyo de Janet Hartin y los Maestros Jardineros de Extensión Cooperativa de UC que se asegurarán de que los residentes continúen recibiendo ayuda adecuada para el cuidado de los árboles mucho después de que termine el proyecto; esta será la tarea de Mario Saucedo y su organización sin fines de lucro de acción comunitaria con sede en Redlands.
El proyecto Redlands ejemplifica los principios básicos de un proyecto bien pensado y ejecutado que incluye el cuidado de los árboles a largo plazo, una verdadera clave para maximizar los beneficios de los árboles durante su vida útil de más de 50 años.
Con una sequía en todo el estado que obliga a restringir el uso del agua, las personas están buscando opciones para ahorrar el vital líquido. Hartin aconseja no sacrificar ningún árbol.
"Una de las cosas que creo que es importante priorizar es asegurarnos de que cuando tengamos que reducir nuestro uso de agua afuera en áreas urbanas, mantengamos nuestros árboles como una prioridad máxima", dijo Hartin. "Si eso significa durante un año o dos que nuestros céspedes y nuestros arbustos de flores se van a quedar en el camino, pues, ni modo, eso es lo que debemos hacer”, dijo Hartin.
"Los árboles maduros son fundamentales para enfriar las islas de calor urbanas, y no podemos darnos el lujo de perderlos y comenzar de nuevo", dijo Hartin. "La sombra de los árboles maduros puede reducir las temperaturas de la superficie hasta en 65 grados en los estacionamientos cubiertos de asfalto. La sombra de un solo árbol puede reducir estas temperaturas de la superficie de 165 a menos de 100 grados cuando las temperaturas del aire alcanzan los 110 grados. Incluso con temperaturas del aire en los años 90, las temperaturas de la superficie pueden alcanzar los 140 grados".
Ella recomienda algo tan simple como arrastrar una manguera hacia afuera y hacia la línea de goteo del árbol, asegurándose de no regar el tronco, sino el otro lado de la línea de goteo donde está el sistema radicular activo.
Además de proporcionar sombra, los árboles absorben y almacenan dióxido de carbono, liberan oxígeno, mejoran los polinizadores y el hábitat de la vida silvestre, filtran los contaminantes del aire y el agua y pueden reducir el uso de energía, según Hartin. Debido a que los árboles tardan años en crecer, no se reemplazan tan fácilmente como otras plantas.
A medida que los residentes dejan secar el césped y que se vuelva marrón, ella recomienda regar los árboles que están cerca o rodeados de césped.
Ella recomienda algo tan simple como arrastrar una manguera hacia afuera y hacia la línea de goteo del árbol, asegurándose de no regar el tronco, sino el otro lado de la línea de goteo donde está el sistema radicular activo.
"Para los árboles frutales, es posible que tengamos que renunciar a la producción de frutas durante un año más o menos. Puede que no haya suficiente agua para apoyar la producción de frutas, pero el objetivo es mantener vivos los árboles durante la sequía", dijo Hartin.
La mayoría de los condados tienen un Programa de Jardineros Maestros de UC con una línea de ayuda atendida por voluntarios bien capacitados que brindan consejos para ayudar a mantener vivas las plantas y recomendar plantas que sean adecuadas para el medio ambiente local. Encuentre un Programa de Jardinero Maestro de UC local en https://mg.ucanr.edu/FindUs.
Para obtener más información sobre el estudio o cómo combatir el cambio climático con árboles:
"Climate-ready tree study: update for Southern California communities" por E. Gregory McPherson, Alison Berry, Natalie van Doorn, Janet Hartin, Jim Downer, Darren Haver y Erica Teach se publica en https://www.fs.usda.gov/treesearch/pubs/60414.
"Los árboles para mañana comienzan hoy".
"Los exuberantes bosques urbanos pueden ayudar a las comunidades a enfrentar el cambio climático".
Video:
https://youtube.com/shorts/-9-dqpRcEso