- Control de la porción: La cena de Acción de Gracias tiene mucho que ver con selecciones. Piense cuáles platillos puede dejar de comer sin que importe mucho y planee llenar su plato solo una vez. Es fácil dejarse llevar por la tentación de servirse una segunda o tercera vez.
- Frutas: Obtenga su porción de fruta en un postre a base de fruta. Manzanas horneadas, peras escalfadas e higos frescos son algunas opciones festivas.
- Granos: Use pan de grano integral o 100% de trigo integral para un relleno rico en fibra.
- Proteína: Sírvase tres onzas de pavo rostizado o una porción del tamaño de la palma de su mano. Deshágase de la grasa quitándole el pellejo al pavo antes de comerlo. Y no se sirva tanta salsa gravy.
- Verduras: Elija platillos acompañantes que incluyan verduras rostizadas o cocidas y evite las salsas cremosas y grasas agregadas. En su lugar, sazone las verduras con hierbas frescas para agregarles sabor.
- Lácteos: Pruebe el yogur sin grasa para agregar a los platillos acompañantes, en lugar de crema agria o mantequilla.
- No se olvide de mantenerse activo. Después de la comida festiva, camine, monte en bicicleta o juegue fútbol con la familia.
¿No sabe qué hacer con las sobras? Reinvente su festín de Acción de Gracias con estas recetas rápidas y fáciles:
- Batido de arándanos
Licue arándanos con yogur congelado bajo en grasa y jugo de naranja. - Ensalada crujiente de pavo
Mezcle pavo cortado en cubitos con apio, manzanas, espinacas en trozos y mayonesa ligera. - Frittata de relleno
Mezcle el relleno con un huevo y cocine muy bien, dádole forma de panqueque. - Rollo de pavo y arándanos
Unte una tortilla de harina integral con salsa de arándanos, coloque una rebanada de pavo y verduras verdes en tiras y enrolle.