- Author: Pamela Kan-Rice
Reconstruir Mejor es el nombre de un plan federal para revitalizar las comunidades marginadas con ayuda a pequeños negocios y entrenamiento para el empleo.
Más de 500 coaliciones, a nivel nacional, presentaron propuestas y la División de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de California, UC ANR obtuvo fondos para un proyecto para impulsar el empleo y la recuperación de las actividades agrícolas en el Valle de San Joaquín mediante: la comercialización de alimentos locales, apoyo empresarial para pequeños agricultores y productores de alimentos, desarrollo de nuevos productos agrícolas y avance tecnológico.
La Coalición para el Futuro de la Innovación de Alimentos de Fresno-Merced, conocida como F3, recibió fondos por 65.1 millones de dólares del plan nacional denominado Build Back Better del Departamento de Comercio de Estados Unidos.De ese monto, 16 millones se asignaron a la Iniciativa para la Innovación de Granjas y Alimentos Locales dirigida por UC ANR. Además de otros fondos complementarios para las contribuciones de costos, con lo que eso asciende a 20.5 millones de dólares.
“Como parte principal del amplio Proyecto F3, la Iniciativa para la Innovación de Granjas y Alimentos Locales será algo trasformador”, señaló Glenda Humiston, vicepresidenta de UC ANR. “Al fortalecer las partes del sistema alimentario para que se apoyen mutuamente, se impulsa la innovación en toda la región y esto traerá muchos beneficios al medioambiente y a la economía de los californianos."
Gabriel Youtsey es el director de innovación de The VINE, una iniciativa de UC ANR que ayuda a que las nuevas tecnologías lleguen al mercado y que los negocios despeguen poniendo en contacto a empresarios y mentores y los recursos y alineando el desarrollo tecnológico de la universidad y las necesidades de la industria y empresas emergentes.
“La Iniciativa Local para la Innovación de las Granjas y Alimentos es un triunfo para el cambio innovador e inclusivo en la agricultura del Valle de Joaquín y una parte fundamental del proyecto F3”, mencionó Youtsey. “Ofrece una variedad de recursos, conocimientos y apoyo para ayudar a los agricultores, productores de alimentos y vendedores para que fortalezcan sus empresas de manera rentable y sostenible, y en consonancia con los objetivos económicos de la región”.
Para garantizar que las soluciones tecnológicas respondan a las necesidades de los pequeños agricultores, se invitará a los propietarios de empresas alimentarias y comunidades locales, a participar y determinar la dirección de las actividades de innovación, indicó Youtsey.
“Con nuestras raíces profundas en el Valle de San Joaquín, Extensión Cooperativa de UC se encuentra en la mejor posición para aprovechar la experiencia de otras partes de UC y ampliar los esfuerzos para ayudar a los agricultores y empresarios del sector alimentario a lograr una prosperidad duradera y la resiliencia de la comunidad”, dijo Humiston. “Los expertos de UC ANR ya están ayudando a los inmigrantes y a otras comunidades marginadas a adaptarse al cambio climático, agregando flexibilidad en las cadenas de suministros y cultivando innovaciones de base. Nos entusiasma que el gobierno federal invierta en hacer que los sistemas alimentarios sean más equitativos, rentables y con soluciones a mayor escala”.
Para apoyar a los pequeños agricultores a cumplir con las nuevas regulaciones, desafíos en la producción, adaptación al cambio climático y la búsqueda de nuevos mercados para sus productos, UC ANR está convocando a la Alianza para la Tecnología e Innovación para Pequeños Agricultores. Ellos colaboran con la Alianza Comunitaria con Familias de Granjeros (Community Alliance with Family Farmers) y otras organizaciones no lucrativas para ofrecer servicios de traducción, capacitación y asistencia comercial a los agricultores y productores de alimentos.
Ruth Dahlquist-Willard, asesora de pequeñas granjas de Extensión Cooperativa de UC en los condados de Fresno y Tulare y Houston Wilson, director del Instituto de Agricultura Orgánica de UC y entomólogo de Extensión Cooperativa en el Centro de Investigación Agrícola y Extensión de UC Kearney en Parlier, encabezan las actividades de difusión y participación con los agricultores orgánicos a pequeña escala.
“Si bien es cierto que necesitamos crear nuevas herramientas para abordar los retos de la agricultura orgánica, es fundamental que los granjeros y otros usuarios se involucren de principio a fin”, manifestó Wilson. “La creación de una tecnología apropiada requiere de una amplia gama de comunicación de todas las partes interesadas”.
Para hacer que la nueva tecnología sea más accesible para los pequeños agricultores y productores de alimentos, UC ANR creará un nuevo equipo, como parte del proyecto F3, para mostrar la nueva tecnología y ponerla a prueba con empresas emergentes de todo el mundo. Y para promover su adopción, se creará un sistema de préstamo de herramientas para que los agricultores puedan practicar con ellas y obtener capacitación para aprender a usarlas.
“Este proyecto ampliará los esfuerzos actuales de apoyo a granjeros a pequeña escala con acceso a equipo, nuevos mercados y apoyo técnico”, dijo Dahlquist-Willard. “Nuestro equipo está comprometido en la participación significativa de los granjeros de las comunidades del Valle de Joaquín en la creación de nuevas herramientas y recursos para el beneficio de la región”.
UC ANR pondrá en marcha, para empresarios y comerciantes, la Academia de Cocina y Alimentos Cultiva La Salud y el Programa de Emprendimiento de Alimentos Saint Rest, los cuales ofrecerán una cocina, equipo y capacitación. Esto creará nuevos empleos y con el tiempo, un mercado para vender esos productos. El Programa Local de Asistencia Comercial para Alimentos promoverá las compras de frutas y verduras cultivadas localmente y otros productos alimentarios.
El Proyecto de Fresno-Merced es uno de los 21 proyectos financiados de las 529 propuestas para el Desafío Regional Build Back Better dirigido a mejorar las comunidades marginadas.
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés
Editado para su publicación por Norma De la Vega
- Author: Emily C. Dooley, UC Davis
Cuando se trata de las lechuzas estadounidenses, olvídese de limpiar en primavera. La mejor época del año para limpiar las cajas de nidos y prepararlas para las parejas reproductoras son de septiembre a noviembre, según una investigación de la Universidad de California en Davis, que analiza casi un siglo de anillado y otros registros.
En un artículo publicado en el Journal of Wildlife Management, los investigadores descubrieron que la fecha promedio para que las lechuzas comunes (Tyto furcata) pongan huevos en California es el 20 de febrero, así que se recomienda limpiar las cajas de nidos durante el otoño.
“El riesgo es que puede molestar un anidamiento que ya ha iniciado”, mencionó el autor principal Ryan Bourbour, candidato a doctorado en ecología en el Departamento de Ciencias Animales en el momento del estudio. “Queremos reducir las perturbaciones a las parejas que anidan incluso en las semanas previas a la puesta de huevos”.
Las lechuzas comunes estadounidenses ofrecen a los responsables del cuidado de la tierra y de las operaciones agrícolas una forma natural de control de plagas, ya que las aves rapaces comen ratones, topos y ratas. Una pareja reproductora puede consumir hasta dos mil roedores anualmente, según la Facultad de Veterinaria de UC David.
Pero las cavidades naturales de los árboles y viejas estructuras de graneros no son tan abundantes como lo fueron antes, así que la instalación de cajas de nidos puede atraer a las lechuzas comunes. Y los administradores de tierras que han instalado estas “redes de cajas de nidos” habían estado preguntado, desde hace tiempo, sobre cuándo es la mejor época para realizar el mantenimiento y limpieza. Planear la limpieza y mantenimiento mucho antes de iniciar la temporada de apareamiento es “parte de hacer que esas cajas de nidos valgan la pena”, indicó Bourbour.
Tras salir del cascarón, los polluelos pasan sus primeros días comiendo y viviendo en las cajas hasta que pueden dejar el nido, dijo Breanna Martinico, otra de los autoras del artículo y candidata a doctorado en ciencias animales en ecología.
Un periodo de anidación de unos 65 días es considerado como largo.
“Esos son dos meses en los que las lechuzas viven y crecen exclusivamente en esas cajas de nido” manifestó Martinico, quien es también asesor en interacciones de humanos y vida silvestre de Extensión Cooperativa de UC para los condados de Napa, Lake y Solano.
En una caja se pueden encontrar tantos como cinco o seis polluelos y se comen entre cuatro y cinco roedores al día. Los polluelos se tragan a su presa completa y lo que no digieren, como pelo y huesos, lo expulsan en forma de bolitas redondas u ovaladas.
“Están allí durante siete a ocho semanas simplemente regurgitando esas bolitas”, indicó Bourbour. “Muchas bolitas se acumulan en el transcurso de una temporada de cría y hay que limpiar muchas de estas cajas”.
De lo anecdótico a la información
Las discusiones sobre qué tan temprano empieza la temporada de reproducción ha sido casi algo anecdótico. Para tener una mejor idea, los autores del artículo analizaron 96 años de registros de anillado del Laboratorio de Anillado de Aves del Servicio Geológico de los Estados Unidos y 39 años de los registros de ingreso del Centro de Aves Rapaces de California en UC Davis. Ambas bases de datos les ayudaron a calcular el momento típico del año en el que ponen los huevos en California, expresó Martinico.
Contar con esta información puede ayudar a que los responsables del cuidado de tierras se aseguren de llevar a cabo el mantenimiento y que las cajas de nidos sean seguras para la siguiente pareja de reproductores. Ayudando así a las poblaciones de lechuzas y beneficiando al mismo tiempo las operaciones agrícolas.
“Nosotros podemos darles las herramientas para que manejen las redes de cajas de nidos de manera efectiva y maximizar el control de plagas a través de las lechuzas”, dijo Martinico.
Entre otros coautores de la investigación se encuentran Emily Phillips, Jessica Schlarbaum y Joshua Hull del Departamento de Ciencias Animales, Michelle Hawkins del Departamento de Medicina y Epidemiologia de la Facultad de Veterinaria de UC Davis y Sara Kross de la Universidad de Columbia.
El financiamiento proviene del programa de Investigación y Educación sobre Agricultura Sustentable en el Oeste del Instituto Nacional de Alimentos y Agricultura.
El artículo se titulaBanding records of nestling barn owls reveal optimal timing for nest box maintenance in California (Los registros de anillamiento de las lechuzas comunes que anidan revelan el momento óptimo para dar mantenimiento a las cajas de nidos en California).
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés
Editado para su publicación por Norma De la Vega
- Author: Michael Hsu
En la lucha contra los incendios, hay todo tipo de obstáculos y uno de tantos es un voluminoso libro de reglamentos que describe, qué tipo de permisos se requieren para eliminar el combustible, como leña y vegetación seca, que pone en mayor peligro los bosques y comunidades.
“California Forest Practice Rules tiene 410 páginas y casi 6 pulgadas grueso señaló Yana Valachovic, asesora forestal de Extensión Cooperativa de UC para los condados de Humboldt y Del Norte y silvicultura. “Tratar de entender qué tipo de permisos tienen sentido en ese reglamento no es fácil, ni siquiera para un experimentado silvicultor profesional”.
Esto salió a flote cuando un grupo de propietarios de tierras y organizaciones en todo California, que estaban trabajando para reducir el combustible leñoso, se enfrentaron a varios problemas para entender la tediosa letanía de requisitos, restricciones y estipulaciones adjuntas a ese texto.
Así que para ayudar a los grupos comunitarios a descifrar las reglas y determinar las opciones más rentables, actualmente hay una nueva guía, sencilla y práctica denominada “Planning and Permitting Forest Fuel-Reduction Projects on Private Lands in California” es la Planificación y autorización de proyectos para la reducción de combustible forestal, producida y redactada por Valachovic, la cual está disponible, en inglés y es gratuita, en el catálogo de la División de Agricultura y Recursos Naturales de UC.
“Creamos un sistema en el que todos los permisos se presentan uno tras otro, como una especie de árbol genealógico para simplificarlo”, manifestó Valachovic, destacando que las gráficas, que ahí se presentan, desglosan los objetivos y parámetros, algo que toda persona que solicite un permiso debe considerar para analizar las opciones de un proyecto.
Por ejemplo, desde el inicio es posible ir simplificando el tedioso proceso, porque se puede determinar si se trata de un proyecto previo o posterior a un incendio forestal. Así como la ubicación y dimensión de los árboles que se eliminarán, las condiciones del sitio antes y después del proyecto, los límites de tiempo potenciales, opciones comerciales y, algo crucial, las limitaciones presupuestarias, dado que el proceso de autorización puede abarcar hasta una tercera parte del costo total del proyecto.
Un manual de planificación y preparación
“Esta ofrece un punto de partida para empezar a poner en orden los numerosos documentos de explotación comercial de la madera y las opciones de financiamiento disponibles para proyectos de modificación de combustibles disponibles”, dijo Curtis. “El dueño del terreno se guía por sí mismo hacia las opciones más apropiadas, además de que facilita que un profesional de recursos asista a esa persona en la selección de la autorización más apropiada”.
La publicación ayuda a que el dueño del terreno o comunidad se prepare como el Resource Conservation Districts, Fire Safe Councils u otros grupos interesados sobre el tipo de preguntas que pudieran surgir en las conversaciones de planificación preliminares con un silvicultor profesional registrado o RPF, por sus siglas en inglés.
Al igual que el propietario de una casa hablaría con un contratista antes de iniciar un proyecto de construcción, los dueños de terrenos y grupos comunitarios deben consultar con un RPF, indicó Valachovic. Un RPF conoce los reglamentos y regulaciones forestales relacionadas con la calidad del agua y aire, protección de especies en extinción y la licencia para presentar los documentos para obtener la autorización.
“Eso es lo que hago en mi trabajo: los dueños de tierras vienen a mí y empiezan a hablar de metas y objetivos”, manifestó la experta. “Empezamos a pensar en posibles plazos, qué metas son a corto plazo, y cuáles a largo plazo y cómo podemos crear un plan operativo para ayudar a esos dueños de terrenos a lograr sus objetivos”.
Proyectos a largo plazo, acciones a corto plazo
A corto plazo, sin embargo, Valachovic enfatiza que ante las condiciones de sequía extrema que hay en todo el estado es crucial que los californianos protejan sus residencias, mantengan mejor control del material combustible, como las plantas a lo largo de la propiedad, leña almacenada y hierbas secas y más que están inmediatamente adyacentes a sus casas, diseñen y revisen los planes de emergencia familiares.
Para información detallada y recursos vea la página sobre Preparación contra Incendios Forestales de UC ANR. (recursos solo disponibles en inglés)
“Hay muchas acciones inmediatas que las personas pueden realizar este año para mitigar el riesgo de incendios forestales y prepararse para lo inesperado”, concluyó la experta.
Además de Valachovic, los coautores de “Planning and Permitting Forest Fuel-Reduction Projects on Private Lands in California” incluyen a Jared Gerstein de BBW Associates y Brita Goldstein, investigadora de UCCE en los condados de Humboldt y Del Norte; ambos son silvicultores profesionales registrados.
Adaptado al español por Leticia Irigoyen del artículo en inglés
Editado para su publicación por Norma De la Vega
- Author: Michael Hsu
La sandía no es solo una de las frutas más grande en el mercado, posiblemente sea también la más jugosa, toda vez que 92 por ciento de su pulpa es prácticamente agua. Es sabrosa y les encanta a niños y adultos cuando se trata de calmar la sed. Pero ante la severa sequía de California, su cultivo tiene numerosos retos como el alto costo del agua, carencia de mano de obra, inflación y más.
Sin embargo, en la busqueda de opciones, los agricultores en coordinación con un investigador de la División de Agricultura y Recursos Naturales, UC ANR han encontrado, en una antigua técnica agrícola, la oportunidad de producir más sandías con menos agua, algo que es muy prometedor.
“El uso de injertos ha abierto un nuevo canal en el mundo de las sandías y para toda la producción de verduras en California”, dijo Zheng Wang, asesor agrícola en los condados en los condados de Stanislaus, San Joaquín y Merced, quien ha estado asesorando a los productores de esta fruta.
Todo comenzó, en el verano de 2018, poco después de que los agricultores presentaron a Wang, un problema apremiante. Supermercados y otros compradores estaban rechazando, por problemas de calidad, un número cada vez mayor de sandías.
A pesar que California es el tercer estado productor de sandías en Estados Unidos, después de Florida y Georgia, la investigación sobre las sandías a nivel estatal ha sido relativamente bajo.
“Parece que las sandías no han atraído mucha atención en relación a otras cucurbitáceas”, mencionó Wang. Cucurbitáceas es el nombre científico de cultivos como melones, todo tipo de calabazas, pepinos y más.
Wang, experto en los injertos de tomates y otros vegetales, sabe que los productores de verduras conocen los beneficios teóricos de los injertos, los cuales combinan un scion (la parte aérea de una planta) con el robusto portainjerto de una planta afín. Sin embargo, el gran reto es comprobar que es costeable. Especialmente en esta era en la que los agricultores enfrentan muchas presiones económicas, ellos necesitan asegurarse que el costo extra por el uso de los injertos es redituable. De ahí que la meta fue desde un principio reducir costos y aumentar rendimiento.
“Algunas veces, como productores queremos probar una nueva técnica agrícola o producto de cosecha”, señaló David Jarrett de Groningen & Sons, quien produce sandías en el Valle de San Joaquín. “Una persona como Zheng puede llevar a cabo un experimento importante y tiene los recursos, cuantitativos y cualitativos, para medir las posibilidades de éxito”.
En 2019 durante las primeras pruebas de colaboración con los productores, Wang probó si podían plantar menos plantas de sandías dejando entre sí un espacio mayor y obtener, al mismo tiempo, una producción estable de sandías de alta calidad.
La idea era que las plantas injertadas, que suelen ser más vigorosas y tienen hojas y un dosel más grande, producirían sandías comercialmente consistentes y que se pudieran cosechar entre 7 u 8 veces durante una temporada de cosecha prolongada.
“De esa manera podemos hacer una planta equivalente a ‘dos'”, explicó Wang, resaltando que las plantas no injertadas tienden a producir únicamente de dos a tres cosechas de buenas sandías y la calidad declina rápidamente a partir de ahí.
Los injertos tienen ‘mucho potencial'
Según Wang, los productores reportaron que, los campos con plantas injertadas produjeron, entre 15 y 25 por ciento más sandías por acre que los cultivos sin injertos, al tiempo que utilizaron un 30 por ciento menos de plantas y la misma cantidad de agua y fertilizantes.
Así, en esta era de una economía difícil, los injertos son una melodía dulce para los oídos de los productores porque ofrecen mayor rentabilidad.
“La agricultura de California se encuentra bajo estrés teniendo que competir por recursos limitados como la tierra, agua, fertilizante y más, pero fuera de este ámbito podemos mejorar algunos de nuestros cultivos con los injertos”, manifestó Jarrett. “Así como muchos cultivos de árboles están injertados, estamos aprendiendo que otros cultivos también pueden ser exitosamente injertados; la meta es crear una planta más fuerte que pueda crecer mejor en suelos marginales con menos insumos”.
Al mismo tiempo, los agricultores están adoptando la nueva técnica agrícola que consiste en sembar los cultivos de sandías con la nueva separación “estándar” de 4 a 5 pies , permitiéndoles reducir su población de plantas al tiempo que incrementan el rendimiento.
“El uso de injertos ha abierto un nueva opción en el mundo de las sandías y para toda la producción de verduras en California”, dijo Wang.
Lo que sigue para Wang es probar varias combinaciones de scions y portainjertos. Este año, inició una variedad de pruebas con portainjertos de varios miembros de la familia de las cucurbitáceas, como calabazas híbridas, calabazas cidra y botella, con la esperanza de generar resultados que los productores de sandías puedan usar para decidir las mejores opciones para sus condiciones locales.
“En resumen, hay muchas incógnitas pero también mucho potencial para el futuro”, manifestó el experto.
Adaptado al español por Norma De la Vega del artículo en inglés
- Author: Randall Oliver
En las batallas no se debe subestimar al enemigo por su tamaño, lo que cobra relevancia cuando la lucha es contra las plagas.
El escarabajo barrenador polífago, es más pequeñito que una semilla de ajonjolí, pero su capacidad destructiva es enorme. Ataca a más de 100 especies de árboles y puede vivir y reproducirse en más de 65 especies de California y entre sus árboles preferidos se encuentran los bojes, sicómoros y los sauces.
El campus de la Universidad de California en Irvine, UCI, fue la escena de una tremenda batalla contra el diminuto invasor el cual había seleccionado a ese bosque urbano, donde hay alrededor de 30 mil árboles, como su paraíso.
A mediados del 2010, ese campus fue amenazado por la plaga debido a su numerosa cantidad de sicómoros, especialmente en el parque Aldrich, localizado en el centro del campus, en donde otros cientos de álamos, sauces autóctonos, árboles de lluvia dorada y de coral también fueron afectados.
El escarabajo que destruyó más de dos mil árboles de diferentes especies del bosque, se caracteriza por inocular la planta con un hongo que ataca el tejido vascular del árbol, impidiendo que el agua y los nutrientes fluyan y causando que el árbol se marchite y muera por una enfermedad llamada marchitamiento por fusarium.
De ahí que un grupo de expertos ejecutaron diferentes estrategias para eliminar a la plaga.
“UCI fue el terreno de pruebas perfecto para determinar las estrategias sobre el manejo integrado de plagas contra el escarabajo y la enfermedad”, mencionó John Kabashima, asesor emérito para la horticultura del medio ambiente de Extensión Cooperativa en el condado de Organge. “Nuestra investigación fue multifacética, y nos permitió profundizar en el monitoreo y pruebas y el manejo cultural y químico”.
En la batalla contra la plaga se formó un equipo de expertos de diferentes departamentos de la Universidad, entre ellos los investigadores de la División de Agricultura y Recursos Naturales de UC ANR y Extensión Cooperativa, así como personal de varias compañías productoras de pesticidas. Todos ellos, asesores en el control de plagas y arboricultores quienes ofrecieron materiales y mano de obra para ayudar a atenuar el costo de la investigación.
El trabajo consistió en ejecutar un inventario completo de árboles afectados en el campus, evaluar la gravedad de la infestación mediante el conteo de los orificios de entrada y salida en los árboles y las señales de marchitamiento. Una clave importante para control fue deshacerse de los amplificadores, es decir los árboles altamente infestados que eran un peligro ya que los escarabajos pueden propagarse a otros árboles.
Se procedió a cortar árboles, tomar muestras y dejar sin tocar ciertos árboles infestados que fueron seleccionados. Además, se exploró toda una variedad de combinaciones de pesticidas y fungicidas y técnicas de aplicación. Estrategias que dieron como resultado varias opciones de control que se están usando actualmente para eliminar la plaga.
“Las infestaciones típicas del escarabajo empiezan en solo pocos árboles que por alguna razón atraen mucho a los escarabajos – quizás en base a las especies de árboles, el espacio entre ellos, condiciones de riego u otros factores”, manifestó Kabashima. “Con el tiempo, los escarabajos y hongos se multiplican sin que sean detectados en esos árboles. Cuando la población de escarabajos alcanza un punto grave y los árboles empiezan a morir, las hembras vuelan a árboles cercanos para una infestación secundaria, infestando, muchos otros árboles en un área grande”.
Una oportunidad para diversificar los bosques urbanos de UC
En UCI, esa invasión inicial sucedió en áreas del parque que contenían muchos sicómoros grandes y majestuosos que fueron plantados cuando el campus inició operaciones a mediados de los 1960.
Durante varios años, UCI retiró 700 árboles altamente infestados, incluyendo muchos de estos sicómoros históricos y los remplazó con árboles de otras especies.
Hoy día, el bosque de UCI luce muy diferente al del 2015. Aunque los escarabajos no han sido eliminados completamente, su presencia se ha reducido significativamente y actualmente UCI cuenta con las herramientas para controlarlos efectivamente. Los esfuerzos de reforestación resultaron en una diversidad de árboles que no solo es sustentable, sino también hermoso.
“Administrar un campus de 1,500 acres con 30 mil árboles es un proceso que nunca termina”, indicó Richard Demerjian, vicerrector asistente de UCI, de Planificación Física y del Medio Ambiente. “Nuestro bosque continúa evolucionando, con un continuo enfoque en el incremento de la diversidad y salud de las plantas”.
Demerjian también destacó que UCI está considerando plantar nuevos árboles sicómoros de manera limitada.
He aquí un manual para la gestión eficaz del barrenillo
Tanto si se gestiona un bosque de miles de árboles como unos pocos, el encargado puede aplicar muchas de las lecciones aprendidas en la UCI para controlar al escarabajo y otras plagas de los árboles.
- Evite mono cultivos. La diversidad de árboles proporciona belleza y resiliencia.
- Mantenga saludables a los árboles. La irrigación y mantenimiento apropiado mantienen árboles fuertes y les ayuda a protegerlo de los barrenillos y otras plagas.
- Revise los árboles. Busque las señales y síntomas comunes de infestación como orificios de entrada y salida de los escarabajos. Un monitoreo regular asegura que las infestaciones se controlen a tiempo, antes que causen el marchitamiento o muerte del árbol.
- Confirme la sospecha de infestaciones. Use la herramienta para detección que aparece en www.ishb.org.
- Revise las opciones para la gestión. Para los árboles, con una baja infestación, pode las ramas infestadas y supervise la salud del árbol en general con el tiempo. En áreas urbanas no ribereñas, considere la posibilidad de tratar árboles con una infestación leve o moderada con pesticidas o fungicidas que han demostrado ser efectivos en contra del complejo de plaga/enfermedad (se requerirá de un profesional con licencia para realizar las aplicaciones). Los árboles que severamente infestados podrían requerir ser eliminados.
- Llame a un profesional. Un arboricultor certificado o un profesional en el control de plagas puede ofrecerle recomendaciones en base a las condiciones del árbol. La oficina local del Comisionado de Agricultura del condado y la oficina de Extensión Cooperativa de UC pueden contar con información adicional sobre el monitoreo y control del escarabajo y programas para su gestión en su área.
- Encárguese de los residuos verdes. Los escarabajos pueden sobrevivir en cortes de madera durante semanas o hasta meses. La eliminación adecuada de los residuos verdes incluye triturar la madera infectada, seguida de una solarización o el compostaje de las virutas.
- Replante sabiamente. Empiece a plantar nuevos árboles solo después de haber retirado todos los “amplificadores” y establecer un programa de revisión continua. Tome en cuenta la concentración actual de especies de árboles cuando decida el tipo de árboles que quiere plantar.
---
Traducción del artículo en inglés - Leticia Irigoyen
Adaptación para su publicación - Norma de la Vega