SAN DIEGO-(UC)— Las mochilas escolares son esenciales para llevar los libros y útiles escolares. Sin embargo, si pesan demasiado o los niños las llevan mal cargadas, pueden ocasionar dolor severo en la espalda, cuello y hombros ocasionar problemas de postura en niños y adolescentes.
“Según la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo de los Estados Unidos, las mochilas demasiado pesadas son responsables de que aproximadamente 5,000 niños tengan que acudir a salas de urgencia cada año”, apunta Patti Wooten-Swanson, especialista en nutrición y asuntos de la familia y del consumidor con Extensión Cooperativa de la Universidad de California.
Explica la especialista que gran parte de la responsabilidad de controlar el peso de la mochila recae en el niño, pero los padres pueden animar a sus hijos a dejar los libros que no necesiten en el escritorio o casillero escolar, si los hay disponibles, en vez de cargar, durante todo el día, con todos los libros que necesitarán. Asegúrese de que no lleven artículos innecesarios, como reproductores de CD, videojuegos o una computadora portátil, si no la necesitan, los cuales agregan peso a la mochila.
Anime a sus hijos a que traigan a casa únicamente los libros que necesitarán para estudiar y hacer la tarea. Y si se percata de que su mochila parece estar más llena los viernes, entérese de la manera en que organizan cumplir con sus deberes escolares. Es probable que en vez de estar haciendo sus tareas durante la semana, estén dejándolas para el fin de semana, lo cual conlleva a que tengan que cargar con más libros los viernes.
Wooten-Swanson brinda algunas recomendaciones que se deben tener en cuenta al comprar las mochilas y para usarlas correctamente, evitando así dolores y lesiones a la espalda.
Al comprar una mochila. Busque una mochila que tenga la parte de atrás acolchonada, al igual que los tirantes, y que estos sean anchos. Los tirantes angostos pueden lastimar los hombros y limitar la circulación de la sangre. Una mochila con la parte de atrás acojinada protege al niño de los bordes de objetos dentro de la mochila y aumenta su comodidad al cargarla.
El uso seguro de una mochila. Para evitar lesiones al cargar una mochila, enseñe a sus hijos a tomar las medidas de precaución que se indican a continuación:
- Limitar el peso de la mochila. Nunca permita que la mochila pese más del 10 al 20 por ciento del peso corporal del niño. Por ejemplo, un niño que pese 80 libras no debe cargar una mochila que pese más de 8 a 12 libras.
- Usar siempre ambos tirantes. Llevar la mochila colgada de un solo hombro puede causar problemas musculares, así como cambiar la curvatura de la columna vertebral.
- Aprovechar todos los compartimentos de la mochila de manera organizada. Empacar los artículos más pesados para que queden cerca de la parte media de la espalda.
- Alzar la mochila correctamente. Al igual que al levantar cualquier objeto pesado, el niño o adolescente debe doblar las rodillas y levantar la mochila con ambas manos para llevársela a los hombros.
- Usar una mochila con ruedas. Este tipo de mochila puede ser útil para los estudiantes que tengan que cargar muchos libros. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que a pesar de las ruedas, los estudiantes tienen que cargarlas o alzarlas al subir escaleras y puede ser difícil hacerlas rodar en ciertas superficies, como en la nieve.
Proteja la salud de sus hijos. Asegúrese de que su mochila esté bien diseñada y que sus hijos aprendan y tomen las medidas adecuadas al usarla para evitar lesionarse.